España se sitúa fuera de la lista de los diez países de la Unión Europea (UE) con mayor cuota de mercado de vehículos con carga eléctrica (eléctricos e híbridos enchufables), al contar tan solo con una penetración del 0,9%, lo que supone 1,3 puntos porcentuales menos del 2,2% de Alemania, país que cierra el 'Top 10'.
Según datos de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA) presentados este jueves en el Automobile Barcelona, España, con un PIB per cápita de 26.200 euros y una reducción del 75% del impuesto anual de circulación para vehículos eléctricos y de bajo consumo, está por encima de países como Italia (0,5% y un PIB per cápita de 29.000 euros), Letonia (0,6% y un PIB per cápita de 14.000 euros) o Bulgaria (0,6% y un PIB per cápita de 8.100 euros), entre otros.
No obstante, la penetración de automóviles con carga eléctrica en el mercado español queda muy lejos de las cuotas que manejan Noruega (PIB per cápita de 73.200 euros), Suecia (PIB per cápita de 47.900 euros) y Holanda (PIB per cápita de 44.600 euros), con cuotas de mercado del 49,1%, 8% y 6,7%, respectivamente.
El 'Top 10' lo completan Finlandia (4,7%, PIB per cápita de 42.200 euros), Suiza (3,2%, PIB per cápita de 74.300 euros), Austria (2,5%, PIB per cápita de 43.600 euros), Bélgica (2,4%, PIB per cápita de 39.600 euros), Francia (2,1%, PIB per cápita de 36.200 euros), Dinamarca (2,1%, PIB per cápita 54.400 euros) y Alemania (2%, PIB per cápita 41.000 euros).
Los tres países con menor cuota de mercado de vehículos eléctricos en Europa son Polonia (0,2% y un PIB per cápita de 12.900 euros), Eslovaquia (0,3% y un PIB per cápita de 16.600 euros) y Grecia (0,3% y un PIB per cápita de 17.100 euros).
Según datos de ACEA, el 80% de las matriculaciones de eléctricos se produce en tan solo seis países de Europa, los que presentan un mayor PIB per cápita. De hecho, la mitad de los Estados miembros de la UE tiene una cuota inferior al 1%.
Sin embargo, las cuotas varían en proporción del volumen de matriculaciones de cada país. "Además de invertir en infraestructura de carga, los gobiernos de la UE deben implementar incentivos significativos y sostenibles para alentar a más consumidores a cambiar a la electricidad", explicó el secretario general de ACEA, Erik Jonnaert, en Barcelona.
Jonnaert, acompañado por el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Mario Armero, subrayó que todas las personas que habitan en la UE deberían poder comprar un vehículo eléctrico, sin importar en el país que vivan.
"Las tecnologías de bajas y cero emisiones deberían ser abordadas por los gobiernos como una cuestión de prioridad", apuntó. Solo doce Estados miembros de la UE ofrecen primas o pagos de bonificaciones a los compradores de estos vehículos.
En el caso de España, existe actualmente el Programa de Incentivos de Movilidad Eficiente y Sostenible (Moves), con una dotación de 45 millones de euros para ayudas a la compra de vehículos alternativos e infraestructuras.