GVB, el operador de transportes de la ciudad de Ámsterdam ha realizado un pedido de 31 autobuses eléctricos del modelo Citea a VDL Bus & Coach para cubrir tres de las líneas de la capital holandesa a partir de 2020. Opcionalmente, y en función del rendimiento, la empresa holandesa ampliará el encargo a 69 autobuses más que se incorporarán más adelante. El contrato incluye la implementación de la infraestructura de recarga.
La nueva flota de autobuses eléctricos cubrirá las líneas 5, 22 y 36 de la capital holandesa que tienen en común su punto de partida, la estación Sloterdijk. El primer lote de 31 autobuses comprende 9 autobuses articulados Citea SLF-120 Electric y 22 convencionales Citea SLFA-180 Electric. La incorporación de nuevas unidades, en los próximos años forma parte del plan de GVB de "reemplazar a toda nuestra flota de autobuses, unos 200 vehículos, con autobuses de cero emisiones", ha declarado Alexandra van Huffelen, directora general de GVB.
VDL Citea SLFA-180 Electric de GVB.
La unidades Citea encargadas por GVB están equipadas con un sistema de pantógrafo que VDL presentó en septiembre, a través del cual los autobuses eléctricos pueden realizar la recarga rápida de sus baterías. Gracias a este sistema se podrá optimizar la disponibilidad operativa de los autobuses eléctricos, de manera que podrán dar servicio a cualquiera de las tres líneas en función de las necesidades.
Los nueve autobuses eléctricos articulados estarán equipados con un sistema de baterías de 288 kWh, mientras que los convencionales contarán con un paquete de baterías de 216 kWh. Una vez en servicio, los autobuses se recargarán gracias a siete cargadores rápidos emplazados en la estación Sloterdijk. Durante la noche, las baterías se recargarán completamente en 31 cargadores lentos situados en un hangar de GVB especialmente acondicionado para esta tarea.
Para VDL no es el primer contrato de electrificación en Ámsterdam. Se ha asociado con la también holandesa Heliox, especialista en el desarrollo de productos y servicios para operadores de vehículos eléctricos, para poner en marcha la mayor estación de carga del mundo cerca del aeropuerto de Schiphol a principios de este año. En su interior albergará 109 estaciones de carga rápida, incluyendo 24 de 450 kW que servirán para cargar 100 autobuses articulados eléctricos de VDL que prestarán servicio en seis rutas por el interior del aeropuerto de Schiphol 24 horas al día 7 días a la semana. Con proyectos como estos, Holanda pretende cumplir su compromiso de suspender las ventas de autobuses diésel a partir de 2025 y conseguir que el transporte público sea cero emisiones en 2030.