La ciudad de Londres está probando un nuevo sistema de sonido en sus autobuses eléctricos e híbridos para alertar a los peatones de la presencia cercana de estos vehículos. El sonido, que se emitirá por los altavoces instalados en la parte frontal, será audible cuando el autobús circule por debajo de 20 km/h, marcha atrás o se detenga en las paradas y será diferente en función de la velocidad a la que circule.
Transport for London (TfL) es la empresa encargada de gestionar los autobuses de la capital de Reino Unido. En su flota ya cuenta con un número importante de unidades eléctricas e híbridas entre las que ha elegido 100 para probar un nuevo sistema de sonido. Tfl, ha contado con la colaboración de varias empresas para desarrollar tanto el sonido como los altavoces especiales situados en la parte frontal del autobús. Sin él, los autobuses son prácticamente silenciosos y "pueden representar un riesgo para la seguridad de los peatones, particularmente para personas ciegas o con deficiencias visuales".
El sonido se emitirá a velocidades inferiores a 20 km/h, cuando el vehículo se desplace marcha atrás o se detenga en una de sus paradas.. El sonido será diferente en función de la velocidad del vehículo, con la idea de que ayude a los peatones a saber dónde está el autobús y en qué dirección se desplaza.
El pasado 1 de julio entró en vigor la nueva normativa de la Unión Europea que obliga a todos los vehículos eléctricos (de batería e híbridos enchufables) que se homologuen a partir de esa fecha, a emitir un sonido cuando circulen a una velocidad inferior a 20 km/h o marcha atrás para advertir de su presencia a los peatones. A partir de julio de 2021 esta obligación se extenderá a todos los vehículos que se comercialicen. Desde enero de 2020, TFL realizará una primera prueba de seis meses con 100 autobuses que realizan la ruta entre la Catedral de San Pablo y Shadwell, de forma previa a la entrada en vigor de la nueva legislación. Posteriormente será ampliada a más autobuses y más líneas.
Claire Mann, directora de operaciones de autobuses de TfL, que este sistema contribuirá a Londres a cumplir su objetivo 'Visión Cero', cero accidentes en carretera para 2041: "Nos comprometemos a garantizar que por las calles de Londres circularán los autobuses más seguros". Kirsty Hoyle, CEO de Transport for All, una de las empresas que ha colaborado con TfL en el desarrollo del sistema, ha explicado que una parte fundamental de su diseño inclusivo ha sido "comprender la experiencia de caminar por las calles de Londres con una discapacidad visual o sensorial".
Legislación europea
La nueva normativa, que lleva en preparación desde 2018 y hasta ahora ha permanecido en fase de consultas, obliga a incorporar un Sistema de Alerta de Vehículos Acústicos (AVAS, por sus siglas en inglés) en los nuevos modelos eléctricos de cuatro ruedas, es decir, categorías M y N, dedicados al transporte de pasajeros y mercancías. En el caso de los vehículos homologados antes del 1 de julio de 2019 tienen de plazo hasta el 1 de julio de 2021 para incorporarlo o actualizarlo si ya cuentan con uno.
La Unión Europea exige que el sonido se emita por debajo de los 20 km/h y cuando circulen marcha atrás, y además no será posible desactivarlo. Se considera que a mayor velocidad el ruido de la rodadura es suficiente para identificar la presencia de un vehículo por lo que se desconectará automáticamente.