Volvo Buses, la división de autocares de Volvo, ha presentado un nuevo chasis para autobuses eléctricos llamado Volvo BZL Electric. Un chasis que ha sido diseñado para poder emplearse tanto en autobuses de uno como de dos pisos, con varias opciones para los carroceros y diferentes configuraciones para el propulsor eléctrico.
La demanda global de soluciones de movilidad eléctrica en el sector del transporte público está aumentando y Volvo Buses espera un rápido incremento en los próximos años. Por esa razón, la compañía está ampliando su oferta a nivel global con esta nueva plataforma, que permitirá alojar hasta cinco baterías con 470 kWh de capacidad total y que ha sido desarrollada con la economía circular en mente, pues será reciclable en más de un 90%.
La plataforma puede alojar de tres a cinco paquetes de baterías de 94 kWh cada uno.
Todos los componentes del chasis y de la línea motriz han sido desarrollados y fabricados por Volvo, tecnologías ya implementadas y sobradamente probadas en Europa. Habrá dos opciones para la motorización: se puede montar un solo motor eléctrico (denominado EPT 402) con 272 CV de potencia máxima y 425 Nm de par motor (19.000 Nm a las ruedas). O bien se puede elegir con dos motores eléctricos (EPT 802), con una potencia total máxima de 544 CV y 850 Nm de par motor (y 31.000 Nm a las ruedas). En ambos casos se equipa una transmisión manual robotizada de 2 velocidades.
Una de las claves de la plataforma BZL Electric está en su modularidad y capacidad de adaptación para distintas configuraciones. Tiene una longitud de 11.815 mm en el caso de autobuses de un piso, y de 10.585 mm para autobuses de dos alturas. El peso bruto permitido es de 19.500 kilos. Lleva un eje delantero Volvo RFS-L, mientras que el eje trasero es un ZF AV133.
El chasis BLZ Electric puede servir como base a autobuses de uno o dos pisos.
El chasis puede alojar de tres a cinco paquetes de baterías de 94 kWh cada uno, con lo cual habrá versiones de 282, 376 y 470 kWh capacidad total. Se trata de baterías de iones de litio con celdas de química NCA (níquel-cobalto-aluminio), una densidad energética de 159 Wh/kg y un voltaje de 600 V. A pesar de los detalles sobre sus características, Volvo no ha publicado ninguna estimación o previsión sobre la autonomía que podrá logar.
Para la recarga se pueden elegir dos opciones diferentes: el estándar CCS2 en corriente continua permite cargar con hasta 150 kW de potencia en corriente continua, con la toma de carga situada en posición trasera derecha o trasera izquierda. Opcionalmente se puede elegir el sistema de carga OppCharge mediante rieles en el techo y un pantógrafo, que puede recargar a un máximo de 300 kW de potencia. Volvo también destaca que esta plataforma está preparada para integrar en el techo un módulo del sistema de almacenamiento de energía y sistemas de varios fabricantes para la calefacción, la ventilación y el aire acondicionado (incluyendo bombas de calor).
La plataforma está preparada para integrar en el techo un módulo de almacenamiento de energía y sistemas para la calefacción y el aire acondicionado .
A nivel de seguridad se incluye lo último en tecnología conectada de Volvo, entre ellas Volvo Connect con servicios conectados, y funciones como la Volvo Zone Management, mediante la cual el operador puede crear zonas de seguridad en las que la velocidad máxima está limitada, por ejemplo, en las cercanías de una escuela o en un depósito de autobuses.