El protagonismo del que ahora goza el ion-litio como principal fórmula para la elaboración de baterías, cada vez más cerca, tiene los días contados. De entre los sustitutos que se barajan, las baterías que incorporaran el azufre como sustituto del litio son las que en esta ocasión toman el protagonismo de la mano de una avioneta eléctrica, la eColt de Texas Aircraft Manufacturing.
¿Por qué se postula el ion-azufre como una de las principales alternativas a las baterías de ion-litio para la próxima generación? La principal ventaja reside en su densidad de energía, que a igualdad de peso y tamaño entre las celdas de las baterías de ion-litio e ion-azufre, las segundas ofrecen hasta cinco veces más energía.
A principios de año ya os contábamos como la empresa que provee de baterías a la avioneta eColt, la británica OXIS, estaría trabajando para estabilizar los ciclos de carga y descarga que adolecían las baterías de ion-azufre, ciclos durante los cuales la estructura de los cátodos quedaba pulverizada debido a la alta inestabilidad.
Aunque este tipo de baterías podría triplicar la autonomía de un coche eléctrico, el principal uso para el que OXIS Energy ha desarrollado estas baterías es para el sector aeronáutico, y Texas Aircraft Manufacturing es uno de sus primeros clientes, que ha encontrado en esta fórmula el aliado perfecto para el eColt.
Gracias a un paquete de baterías de 90 kWh que Oxis energy ha desarrollado para la eColt, con una densidad de 470 Wh por cada kilo de peso del mismo paquete, el ahorro de peso que se habría conseguido conforme al uso de ion-litio habría sido del 40%. Esto habría llevado a la eColt a alcanzar una autonomía de vuelo de dos horas o 240 kilómetros, cifras que destacan para una fase de uso tan temprana para el ion-azufre. A igualdad de condiciones, en una avioneta eléctrica como al eColt, la autonomía no habrá podido ir más allá de los 90 kilómetros con un paquete de baterías de ion-litio.
El fin de la eColt es el mismo que tendría la última avioneta eléctrica en pasar por nuestra portada, la Pipistrel Velis Electro, que estaría destinada a la formación y entrenamientos de nuevos pilotos, aunque esta no llegaría a realizar vuelos de más de una hora, por lo que la eColt de Texas Aircraft Manufacturing duplica el tiempo de vuelo.
En una entrevista para IEEE Spectrum, el director de desarrollo e integración de baterías de Oxis Energy ha dicho que para el eColt habrían desarrollado un nuevo tipo de celda de ion-azufre, una bolsa, que sería capaz de elevar la densidad de energía hasta los mencionados 470 kWh por cada kilo, pudiendo llegar a los 500 en menos de un año, y que incluso en un margen de tiempo realista, para 2025, podrían estar hablando de hasta 600 kWh.
Otra de las ventajas que plantearían las celdas de ion-azufre contra las de ion-litio es el aprovechamiento energético que brindaría su rango de uso, ya que mientras las actuales de ion-litio estarían ofreciendo un rango real de utilización que iría del 10% al 90% de la batería, las que usaran ion-azufre se podrían aprovechar desde el 0% hasta el 100%.
No todo es tan bonito en el cuento del ion-azufre, ya que el problema que sigue planteándose como el de mayor envergadura es la vida útil de la propia batería, y Oxis Energy estaría trabajando para que sus baterías de ion-azufre pudieran llegar a los 500 ciclos de carga y descarga, y aunque estemos ante baterías que gracias a una mayor autonomía deberían recargarse proporcionalmente menos durante su vida útil, no deja de ser un reto para Oxis Energy.