Desde hace varios años algunas de las marcas más relevantes del sector aeronáutico están apostando por la investigación y desarrollo de aviones movidos de forma completamente eléctrica. Aunque hay grandes marcas muy conocidas, este nuevo segmento también ha sabido atraer las miradas de nuevas inversiones por parte de empresas con todavía una corta vida.
Por ahora es un sector que aún le queda camino por recorrer pero que poco a poco va alcanzando sus metas. Hasta no hace muchos años, muchas empresas y marcas apostaban por una politización del mismo en el año 2021, aunque por causa de la crisis actual muchas han bajado el ritmo pero se espera un auge en los próximos años.
Rolls-Royce
Rolls-Royce es una marca conocida mundialmente gracias a sus coches de elevado lujo, pero en el sector aeronáutico está en el pináculo en cuanto a diseño y fabricación de motores y turbinas para aviones. Esta empresa también se ha decantado por la innovación en el ámbito de estos vehículos movidos por energía limpia, y en los próximos años espera presentarnos una aeronave completamente funcional y con la posibilidad de albergar pasajeros.
Pero no se quedan ahí los planes de la marca inglesa, ya que está preparando el avión eléctrico más rápido del mundo con las miras puestas en batir el récord de velocidad en vuelo. Sitúan su diana en el año 2026, cuando esperan comenzar a comercializar su primer avión 100% eléctrico de tamaño reducido con capacidad para 11 pasajeros.
ZeroAvia
Una empresa con unas miras muy parecidas a la mencionada anteriormente Pipistrel, y es que tan sólo un mes después de los eslovenos, los chicos de Zero Avia también fueron capaces de completar su primer vuelo con éxito, aunque en este caso, la aeronave estaba alimentada por hidrógeno a través de una pila de combustible.
Hace tan sólo un mes, British Airways junto a un grupo de inversores, realizó una inversión de 24,3 millones de dólares en ZeroAvia para acelerar el proceso de desarrollo de aviones de más de 50 plazas. Los plazos que estipula esta empresa tan ecofriendly es de poder tener disponibles aviones comerciales para 50 pasajeros dentro de 5 años, y de hasta 100 butacas para el año 2030. La mirada está puesta sobre el año 2050, cuando esperan que los desplazamientos vía aire sean completamente limpios.
Airbus
Posiblemente la marca más conocida y con un mayor prestigio mundial dentro del sector aeronáutico. Desde hace tiempo es bien conocido que esta empresa ha virado su rumbo en favor de unas aeronaves con nula expulsión de gases nocivos. Esto lo ha llevado a cabo principalmente a través del hidrógeno, de hecho, hace algunos meses ya vimos sus primeros diseños de forma conceptual, pero también nos pudimos ver cómo su primer helicóptero eléctrico CityAirbus efectuaba su primer vuelo.
Una de las mayores y más importantes marcas del sector, la cual comercializa cientos de aviones actualmente, está remando a favor de un sector completamente limpio y con cero emisiones. Sus miras están puestas en el año 2035 cuando esperan conseguir dicha meta. Por el momento parece que el viento sopla a su favor.
Pipistrel
Y pasamos de multinacionales muy conocidas a una empresa que ha sabido calar bien hondo dentro del segmento de la aviación eléctrica. A pesar de no tener el nivel económico de marcas de tan alto calibre, los chicos de Pipistrel han dado en la tecla correcta y hace algo menos de un año consiguieron que su primer avión tripulado completase un vuelo completo con éxito.
Gracias al primer vuelo del Pipistrel Velis Electro, supuso toda una revolución para la marca y para el sector. Actualmente la marca eslovena se encuentra inmersa en nuevas búsquedas de explotación del sector, como su llamado Nuuva Series, una gama conceptual de aviones autónomos capaces de despegar verticalmente.
Estas son algunas de las marcas que más calado internacional están consiguiendo en el apartado de las aeronaves con cero emisiones, aunque existen otras muchas que intentan poner su pequeño grano de arena en este sector como Porsche, Geely, Amazon o incluso Hyundai de la mano de Uber. Lo que queda claro es que en todos los sectores se está tornando la mirada hacia un futuro completamente limpio de emisiones.