Por un momento, imaginad un barco completamente eléctrico, con una ingeniería de inspiración aeroespacial y un paquete de baterías de alta densidad. Suena todo bastante futurista y, de alguna manera, casi utópico. Pero una startup de origen californiano ha lanzado un primer globo sonda sobre lo que será su futuro modelo completamente real, el llamado Arc One.
Este proyecto está salido de la mente de un grupo de antiguos ingenieros de cohetes que decidieron dar a luz un modelo de barco recreativo que no precisaría de un mantenimiento constante y gozaría de una navegación silenciosa y tranquila. Este navío es capaz de llevar la ingeniería marítima hasta un siguiente nivel en prácticamente todos los ámbitos. Este será el primer modelo lanzado por la nueva marca, y ciertamente, no puede tener datos más interesantes.
La primera, y una de las características más llamativas del Arc One, es la ingeniería que hay detrás de la construcción de su casco. Generalmente, las embarcaciones de este tipo suelen estar fabricadas en fibra de carbono, fibra de vidrio u otros materiales ligeros y con una alta resistencia. Pero en el caso del One, su estructura se ha fabricado en aluminio, que proporciona una estructura resistente, ligera y suficientemente maleable para tomar la forma apropiada.
La autonomía del Arc One es de 3 a 5 horas en uso continuo.
El Arc One tiene una longitud total de 7,3 metros, mientras que en su interior puede dar cabida hasta a diez pasajeros. Mecánicamente instala un motor eléctrico de 475 CV de potencia, gracias al cual, es capaz de alcanzar una velocidad punta de 65 kilómetros por hora. Sin embargo, aunque esto parezca muy bueno en todos los aspectos, el conjunto de sus baterías se lleva el protagonismo de este apartado.
Cuenta con un paquete de baterías de 200 kWh de capacidad total, mientras que su fabricación se lleva a cabo de forma artesanal y a medida. A pesar de esto, desde Arc no han dado más detalles sobre otras características técnicas de su mecánica, tan sólo sabemos que su autonomía máxima es de 3 a 5 horas en uso continuo, lo que redunda en unos datos más que positivos.
Pero uno de los valores principales que quisieron hacer los ingenieros con el Arc One fue crear un navío de recreo familiar que no hubiese que estar revisando continuamente y que tuviese un mantenimiento prácticamente inexistente. Es por ello que su apartado mecánico está desarrollado de la forma más simple posible, con el menor número de piezas móviles. Una vez tengamos este barco, únicamente deberíamos preocuparnos acerca del estado de sus actualizaciones de software, ya que, al igual que sucede en coches actuales, podrá mantenerse al día de forma automatizada e inalámbrica.
El Arc One ya se encuentra disponible para su adquisición aunque, antes de sacar la chequera, debes saber que su lista de espera es larga, pues la primera unidad será lanzada dentro de 6 meses, y a partir de ahí, los demás. Su precio no se ha especificado detalladamente, pero el propio CEO de la empresa ya expresó que las primeras unidades tendrán un coste cercano a los 300.000 dólares. Una vez se vayan lanzando al mercado diferentes modelos y acabados, su precio irá disminuyendo paulatinamente pero, desde aquí, dudamos que su coste se sitúe en algún momento en cifras asumibles para la mayoría de carteras.