El Electrom, un vehículo eléctrico ligero difícil de encuadrar en cuanto a su aspecto, que se mueve a caballo entre una bicicleta y un ciclomotor y que por especificaciones precisará de homologación y matriculación según las normativas actuales, ha comenzado a comercializarse. Eso sí, por ahora su adquisición requiere un esfuerzo por parte del comprador puesto que se entrega en forma de kit que es necesario montar previa consulta con su creador.
Hace cuatro años el ciclista y empresario canadiense Fabrizio Cross presentó el Electrom. Se trata de vehículo con unas características que lo hacen superior en cuanto a prestaciones que una bicicleta eléctrica. En realidad se puede considerar que es un velomóvil, un vehículo de tracción humana y carrocería aerodinámica que es una evolución respecto a las bicicletas, pero que generalmente tiene un hándicap en las pendientes por su extra de peso.
Respecto a estos, su manejo resulta más ágil gracias que cuenta con dos ruedas en lugar de tres o cuatro como en otros casos y a una estructura más estrecha. "Las bicicletas eléctricas son geniales, y para muchas personas son todo lo que se necesitan. Sin embargo, el Electrom ocupa la brecha entre estas y el automóvil, sin dejar de ofrecer sus beneficios para el tráfico, la salud y el medioambiente", aseguraba Cross.
Por encima de su diseño, la característica que realmente distingue al Electrom como un vehículo eléctrico único en su clase es su sistema de transmisión dual. Bajo el nombre de Generator & Chain Drive, el sistema original que se presentó hace cuatro años ha llegado al vehículo de producción final.
Fabrizio Cross, creador del Electrom, sentado en la versión de producción.
A bajas velocidades, las dos cadenas de transmisión independientes trasladan la potencia del pedaleo del ciclista tanto a un generador de a bordo como a la rueda trasera. De esta manera, el ciclista activa el motor eléctrico de cubo situado en la rueda trasera mediante una transmisión directa de alta velocidad que permite al Electrom acelerar o subir pendientes. El conductor y el motor trasero son asistidos por un motor eléctrico situado en el buje de la rueda delantera con engranajes mucho más desmultiplicados, lo que convierte al Electrom en un vehículo con dos ruedas motrices. El motor de buje trasero Nine Continents 212 de Electrom tiene una potencia punta de 3.000 W y el delantero, un Bafang G311 alcanza los 600 W.
Una vez que se alcanza una velocidad de 15 km/h, la cadena de transmisión trasera comienza a girar libremente y toda la potencia de pedaleo del ciclista pasa al generador que es el que se encarga de alimentar una batería y mover el motor, de manera que el pedaleo deja de impulsar la rueda trasera. De esta forma, la velocidad a la que el ciclista está pedaleando no determina la velocidad a la que viaja el vehículo.
Esto permite pedalear continuamente a una velocidad cómoda (alrededor de 80 rpm) mientras que la velocidad a la que se desplaza el Electrom se controla mediante un acelerador. Como ventaja adicional, no es necesario disponer de un cambio de marcha. Mientras tanto, el motor eléctrico delantero se apaga automáticamente a velocidades superiores a 28 km/h, pasando a convertir al Electrom en un vehículo de tracción trasera.
El Electrom ofrece una posición de conducción cómoda y aerodinámica gracias a un asiento reclinado y unos mandos situados a ambos lados de este.
Según su creador, una carga completa del paquete de baterías de litio de 2.800 Wh debería ser suficiente para recorrer 200 kilómetros, con la ayuda del pedaleo y el sistema de frenado regenerativo. Además, una segunda batería opcional duplica ese rango. El vehículo puede alcanzar una velocidad máxima de 65 km/h, aunque es posible ajustarla electrónicamente para cumplir con las regulaciones locales que rigen para las bicicletas eléctricas o para los ciclomotores.
El Electrom está fabricado a partir de un marco monocasco de aluminio cubierto por paneles de carrocería de fibra de carbono. Cuenta con suspensión delantera y trasera y un sistema de transmisión cubierto para protegerlo de las inclemencias climatológicas, pero accesible. El sistema de dirección es por cable y las llantas de 20 pulgadas de diámetro y 2,75 de ancho. Se añade un sistema de iluminación completo con intermitentes y luces de freno y, en la parte trasera un espacio de carga de 150 litros. El peso total del conjunto es de 70 kilogramos con las dos baterías incluidas.
El Electrom se encuentra actualmente a la venta a través de su página web previa consulta con su creador. Este envía desde Canadá un kit completo con el vehículo que cada comprador debe montar cuando lo haya recibido. El precio de venta es de 12.500 dólares canadienses (unos 8.600 euros al cambio) y las entregas están previstas para la próxima primavera. En función del interés que muestre el mercado, puede estar disponible una versión del vehículo totalmente ensamblada.