La última ola de bicicletas eléctricas lanzada por el fabricante norteamericano Trek está formada por la gama SD+, de carácter urbano y por la Fuel EXe, una bicicleta de montaña ligera y de altas prestaciones que inauguraba el empleo de los motores de TQ. Ahora le toca el turno a las modalidades de carretera y gravel con la presentación de la Domane+ SLR. La plataforma común fabricada en fibra de carbono minimiza los inconvenientes de la asistencia eléctrica en estas disciplinas, como el peso y el ruido, sin comprometer en absoluto la potencia o la autonomía.
La nueva SLR de Trek no solo es la bicicleta eléctrica de carretera más ligera del fabricante de cuantas ha puesto en el mercado hasta la fecha, sino que cuenta con una velocidad máxima más alta que otras Domane+ eléctricas y hasta 96 kilómetros de autonomía con el sistema de pedaleo asistido.
Para lograr su objetivo, Trek ha sustituido la unidad de accionamiento extraíble de Fazua que ha utilizado en otros modelos Domane+ para incorporar la unidad intermedia eléctrica TQ HPR50, la misma que alimenta la Fuel EXe. Esa transmisión está oculta cuidadosamente detrás del plato y está diseñada para ser más pequeña y liviana que otras transmisiones de bicicleta eléctrica: su peso es de 1,8 kilogramos. Se alimenta de una batería de 360 Wh debidamente escondida en el tubo inferior. Aunque este es ciertamente más voluminoso y robusto que el de la Domane sin motor, el elegante diseño que ha incorporado Trek es menos llamativo que los modelos de bicicleta eléctrica Domane+ impulsados por motores Fazua.
El fabricante del sistema asegura también que la unidad TQ es 1,5 veces más silenciosa que otros motores eléctricos, prometiendo un alto rendimiento y una asistencia suave que se traduce en una conducción más natural. En pocas palabras, está destinado a proporcionar la potencia adicional que el ciclista desea, sin el peso, el volumen, el ruido o la sensación contraria a la intuición que ofrecen otros sistemas.
Al combinar este sistema de asistencia con un cuadro de fibra de carbono OCLV Serie 800 de grado más alto, Trek mantiene el peso total de la bicicleta en 11,66 kilogramos para el modelo de tamaño mediano. Si bien el resultado no es tan ligero como los 8,5 kilogramos de la HPS Domestique, si está en la línea de la LeMond Prolog de 11,8 kilogramos o la Specialized S-Works Turbo Creo SL de 11,9 kilogramos.
Otro factor que convierte a la Domane+ SLR Trek en una bicicleta eléctrica de carretera "distinta a las demás" es su potencia. El sistema TQ tiene tres modos separados que ofrecen velocidades de asistencia de hasta 45 km/h, aunque para Europa esta se encuentra limitada a 25 km/h, según indica la normativa para vehículos EPAC. La autonomía que se puede lograr en el modo de asistencia ecológico es de 96 kilómetros, que pueden llegar a ser hasta 145 si se incluye la batería extensora de autonomía que se puede colocar en el portabidones y que es opcional. El ciclista puede cambiar de modo utilizando los selectores de botones integrados en las manetas del manillar.
La Domane+ SLR también incluye una pantalla digital empotrada en la parte delantera del tubo superior de fácil la visualización. El puerto de carga de la batería está ubicado debajo de una cubierta en el tubo inferior.
La gama Domane+ SLR incluye modelos de carretera y gravel. La variante de carretera monta una transmisión Shimano 2x y llantas de carretera de 32 mm. En cualquier caso, si el propietario desea cambiarlas, también puede albergar llantas de grava de 40 mm. La variante gravel incorpora una transmisión SRAM eTap AXS 1x y neumáticos de grava de 40 mm.
Tanto los modelos de carretera como los de grava vienen en tres niveles de construcción, con precios base que oscilan entre 9.000 y los 14.500 euros. Sus características detalladas pueden consultarse a través de este enlace. Aquellos que busquen el peso más bajo y componentes de primer nivel como es la transmisión electrónica inalámbrica Shimano Dura-Ace Di2 tendrán que elegir el modelo de gama más alta. El modelo base es la Domane+ SLR que tiene un precio de 9.000 euros y un peso de 12,6 kg, frente a los 11, 6 del modelo superior. En la versión gravel el diferencial de peso es menos acusado, ya la versión de gama más alta pesa 12,4 kilogramos.
