En el contexto en el que las bicicletas eléctricas están convirtiéndose en un mercado muy apetecible, plagado de modelos urbanos, plegables y rígidos, de paseo y de montaña. Sin embargo, las bicicletas eléctricas de carreteras, parecen no disfrutar de una popularidad tan grande. Pero existir, existen y si son como la Trek Domane + HP7 habrá quien esté dispuesto a pagar los más de 10.000 euros que el fabricante americano pide por esta maravilla de diseño y tecnología.
Se trata de una de las bicicletas eléctricas mejor diseñadas de todas las que han llegado al mercado durante este año. La Trek Domane + HP 7 ofrece belleza, tecnología y prestaciones a partes iguales, y todo eso, por ahora, se paga con dinero. Lo primero que hay que destacar es que esta bicicleta no quiere esconder su carácter de eléctrica, es decir, en su cuadro se nota que hay una batería, así que no se la podrá ver compitiendo en carreras oficiales. Pero sí será una compañera eficaz en las rutas de quienes disfrutan de hacer muchos kilómetros por carretera los fines de semana.
El cuadro está fabricado en fibra de carbono con la tecnología OCLV patentada por Trek. Todo el cableado de los frenos y los cambios se enruta en su interior, además de incorporar en el tubo inclinado una batería extraíble. Su cuidada geometría proporciona al ciclista la posición más cómoda para pedalear, pero su característica más diferenciadora es el sistema de doble suspensión Trek IsoSpeed. El tubo superior horizontal es ajustable, de manera que la bicicleta mantiene la forma de diamante en las situaciones generales, pero puede desacoplarse del tubo vertical de la tija del sillín para que esta se flexione en caso de impacto cuando se pasa sobre un bache. Igualmente, hay un sistema similar en la parte delantera del tubo horizontal.
Sistema Trek IsoSpeed entre el tubo horizontal y el vertical para la suspensión trasera de la Trek Domane+ HP 7.
La batería que aloja en el tubo inclinado es facturada por Bosch. Se trata de una PowerTube 500, con 500 Wh de capacidad que, inesperadamente, no es la mayor que aparece en el catálogo del proveedor, que es de 625 Wh. Intencionadamente, Trek no hace ninguna mención a la autonomía que es capaz de ofrecer, puesto que en una bicicleta eléctrica de carretera eso depende mucho del esfuerzo que el ciclista sea capaz de hacer y de las condiciones orográficas, que pueden ser muy cambiantes en cada recorrido que se haga con ella.
Alimenta un motor, también de Bosch, el Performance Speed, capaz de generar hasta 75 Nm de par y apoyar el pedaleo del ciclista hasta los 45 km/h. La carcasa que recubre los mecanismos está fabricada en magnesio para reducir su peso y su diseño ofrece la posibilidad de instalar platos más grandes. El mecanismo interior reduce la resistencia al pedaleo cuando no existe asistencia eléctrica. La transmisión Shimano de 11 marchas incluye componentes de las líneas Ultegra, Deore y GRX. Los frenos, del mismo proveedor, incluyen un disco hidráulico de montaje plano RX400 y rotores de bloqueo central MT800 de 16 mm.
Motor Bosch Performance Speed.
Bontrager se encarga del resto de componentes: ruedas, sillín, tija, manillar, potencia e incluso la cadena que ofrece, al igual que Trek para el cuadro, garantía de por vida. El peso total del conjunto es de 16,22 kilogramos. El precio de venta al por mayor de esta bicicleta es de 9.700 dólares (unos 8.000 euros) a los que hay que sumar las comisiones de los intermediarios que permiten que llegue hasta los compradores.