Por los test de seguridad que realizan agencias como la Euro NCAP pasan prácticamente todos los coches del mercado, sean de combustión o eléctricos. Las estrellas con las que salen calificados se suelen utilizar como un reclamo comercial a la hora de la venta. Pero, ¿qué pasa con otras tipologías de vehículos? En el caso de los camiones eléctricos, Volvo Trucks ha querido mostrar hasta dónde llega su seguridad.
Para cualquier vehículo, obtener en las pruebas las cinco estrellas que implican el máximo de seguridad ante un accidente es prácticamente una obligación. Anna Wrige Berling, directora de Seguridad de Volvo Trucks, explica cómo están diseñados sus camiones eléctricos para resistir todo tipo de choques, aunque en este caso no hay estrellas que mostrar.
"Los camiones eléctricos de Volvo utilizan las mismas cabinas que los camiones diésel tradicionales, que han sido probados minuciosamente para garantizar que sean resistentes a los choques", señala. Además, "también cuentan con los mismos sistemas de seguridad que previenen los accidentes".
Sin embargo, los camiones eléctricos a batería tienen sus propios desafíos de seguridad específicos que hay que abordar en estas pruebas
Las pruebas virtuales previas
Si bien un camión eléctrico es exteriormente muy similar a uno tradicional, el sistema eléctrico de propulsión debe ser tratado de manera diferente. Al incluir una batería que funciona a 600 V hay que tener en cuenta qué pasa con ella cuando se produce una colisión. El riesgo de fuga de productos químicos del sistema debe minimizarse, así como la probabilidad de que se produzca un incendio.
Volvo utiliza cálculos rigurosos, simulaciones virtuales y pruebas de choque a gran escala para verificar la seguridad de los camiones eléctricos en caso de choque. "Los cálculos y las simulaciones virtuales son la base cuando desarrollamos y verificamos un diseño seguro para nuestros camiones eléctricos. De esta manera, podemos probar una variedad de escenarios y parámetros digitalmente. Para verificar los resultados de las simulaciones, también realizamos pruebas completas de choque a gran escala", explica Wrige.
Las pruebas reales
Las test de choque simulan situaciones reales de tráfico. Su objetivo es verificar que los camiones cumplen los requisitos en materia de seguridad eléctrica, química y contra incendios. "El propósito de estas pruebas a gran escala es minimizar el riesgo de incendio y fugas químicas al verificar que las baterías y los componentes eléctricos permanecen en su lugar en una colisión y que se apaga el sistema de alto voltaje", aclara Wrige.
En el Volvo FM Electric se han llevado a cabo tres tipos de pruebas de choque a gran escala. Los resultados de las pruebas confirman los resultados positivos de las simulaciones virtuales:
Prueba de colisión lateral. En esta prueba, un carro simula un automóvil de pasajeros que choca contra el costado del camión, donde están instaladas las baterías. La prueba verifica que los paquetes de baterías, con sus módulos y celdas, estén bien protegidos y permanecen en su lugar incluso cuando se exponen a una gran fuerza.
Prueba de vuelco. Con la simulación del vuelco de un camión, se verifica el apagado del sistema de alto voltaje con el objetivo de minimizar los riesgos de seguridad para el conductor y para el equipo de rescate.
Prueba de la barrera. En este caso, un camión choca contra una barrera que simula la parte trasera de otro. El objetivo es garantizar que las instalaciones eléctricas y los componentes situados debajo de la cabina permanezcan en su lugar y que no haya escapes de productos químicos que conduzcan a incendios u otras situaciones peligrosas.