La cadena de supermercados alemana Lidl y la compañía sueca Einride se asociaron en 2017 con el objetivo de establecer un transporte de mercancías más sostenible, con menos emisiones de gases contaminantes, e incluso automatizar los repartos. Mientras esto último necesitará todavía más tiempo, ambas compañías ya han anunciado el siguiente paso en su electrificación.
El próximo mes de octubre, Lidl tiene previsto comenzar a operar con el primer camión eléctrico de Einride. Lo que no está claro es qué vehículo será exactamente, aunque lo más probable es que sea un camión de diseño más convencional (imagen inferior) que uno de los últimos modelos que mostraron (imagen de portada).
Inicialmente, el proyecto se centrará en la región de Estocolmo (Suecia), donde este mismo otoño se iniciarán trabajos de transporte regular con vehículos eléctricos entre el almacén central de Lidl y los supermercados de la zona. En otra fase posterior se ampliará el área de operación e incluirá más localizaciones en Suecia.
Camión eléctrico Einride T-Pod.
Ambas compañían tienen la ambición de electrificar y automatizar el reparto de mercancías, pero adaptar toda su red logística llevará tiempo y se realizará por etapas. A corto plazo seguirá centrándose en la electrificación, y la automatización gracias a camiones autónomas llegará en próximas fases del proyecto.
El objetivo de Lidl es tener red logística (en Suecia) completamente libre de combustibles fósibles para el año 2025, lo cual irremediablemente conlleva la adopción de vehículos eléctricos. Algo que, de paso, conlleva también un ahorro en los costes de transporte.
Una proporción significativa de todo el transporte electrificado de Lidl, así como muchos futuros envíos con camiones sin conductor, se realizará con vehículos eléctricos de Einride,