Una vez más, se confirma que la electrificación va en serio y que la industria del automóvil se enfrenta a una etapa de cambios severos ante la nueva era del coche eléctrico. El último informe publicado por Global Data revela que, en poco más de dos décadas, la cantidad de coches eléctricos que circulan por nuestras calles se multiplicará por cien. Y es que la agencia consultora considera el vehículo eléctrico, junto con el coche conectado, la conducción autónoma y el transporte como servicio, las cuatro fuerzas disruptivas del statu quo de la industria automotriz.
En el último informa de la compañía, Global Data asegura que pasaremos de los aproximadamente 3 millones de vehículos eléctricos que existen globalmente en la actualidad a un total de 300 millones de coches eléctricos para el año 2040. "Esperamos en los próximos años estrés, agitación y márgenes cada vez más pequeños para los fabricantes y proveedores de primera línea ante la transición de la industria hacia el coche eléctrico", dijo Cyrus Mewawalla, jefe de investigación temática en Global Data. "Estamos en los inicios de un nuevo ciclo, pero en la próxima década la cadena de valor de la industria del automóvil será transformada por el vehículo eléctrico", afirmó.
En cuanto a las ventas de automóviles, la consultora predice que del 1% de matriculaciones que se realizan a día de hoy, el coche eléctrico pasará a ocupar el 15% de la cuota de mercado para el año 2030. En cambio, a pesar de su evolución positiva en el mercado, los vehículos eléctricos no pasarán a producirse a gran escala hasta mediados de la próxima década. Será entonces, a partir de 2025, cuando la producción de baterías y vehículos eléctricos esté preparada para abordar la electrificación masiva del parque motor global.
Cifras y fechas a parte, Global Data también nos ofrece una visión anticipada del contexto económico de la industria automovilística para los próximos años: se embarcará en una etapa de grandes inversiones, márgenes cada vez menores y una disrupción tecnológica sin precedentes en la que serán habituales las adquisiciones y fusiones entre compañías. Para terminar, el informe prevé que muchos fabricantes de automóviles no conseguirán sobrevivir a esta explosión de severos cambios, y el coche eléctrico habrá sido el detonante.