Los motores eléctricos no cuentan por ahora con el entorno productivo de los motores de combustión. La poca flexibilidad de sus procesos de producción y la aplicación de la automatización de forma todavía parcial dan como resultado una baja productividad. AgiloDrive es un proyecto alemán, lanzado desde el Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT), para desarrollar productos y tecnologías de producción para motores eléctricos, modulares y escalables, que puedan ser transferidos directamente a la industria.
Actualmente, los motores eléctricos se producen principalmente en pequeñas cantidades. En los talleres, parcialmente automatizados, algunos de los procesos se llevan a cabo todavía manualmente y en líneas de trabajo altamente especializadas pero muy inflexibles. El resultado es una cadena de producción con una productividad muy baja. Cuando un equipo de expertos diseña y optimizan alguno de sus procesos industriales, en muchos casos se hace de manera local, sin transferencias a otras áreas, de forma que el desarrollo industrial se ve coartado por la falta de una línea establecida de comunicación.
El Instituto alemán de Tecnología de Karlsruhe (KIT) ha puesto en marcha el proyecto AgiloDrive, para el que cuenta con la financiación del Ministerio de Economía, Trabajo y Vivienda del Estado alemán de Baden-Württemberg que lo ha dotado con un millón de euros para una primera fase piloto de demostración. El objetivo de AgiloDrive es desarrollar un sistema de producción innovador y ágil, basado en tecnologías modulares y específicas para los motores eléctricos. Teniendo en cuenta sus características particulares es posible automatizar la producción y trasladar estos avances a lo largo de toda la cadena de fabricación. Este esquema ofrece una integración tecnológica y económicamente eficiente a un mercado, el de la movilidad eléctrica, que en su inicio es todavía profundamente volátil.
Según el profesor Jürgen Fleischer, Jefe del Instituto de Ciencias de la Producción del KIT, en AgiloDrive se reúne las dos condiciones esenciales que requiere cualquier producto industrial: la producción flexible y eficiente y la viabilidad económica. El resultado es la puesta en marcha de las economías de escala que permiten la reducción de los costes de fabricación finales. Los socios que participan unirán sus experiencias y conocimientos a lo largo del proceso, desde el suministro de piezas al desarrollo de cada uno de los procedimientos de producción.
La base del proyecto es su posibilidad de cambiar en función de la producción. Para ello, los elementos de fabricación modulares, las interfaces estandarizadas y los conceptos de escalabilidad son los cimientos sobre los que se construye AgiloDrive. El objetivo es dar una respuesta flexible e inmediata a los requisitos de un mercado muy cambiante tecnológicamente. Al aplicar estas técnicas, se reduce el riesgo empresarial y las inversiones pueden adaptarse de forma dinámica a la demanda real. El resultado son unos costes de producción reducidos sea cual sea la tecnología y el producto que se fabrique en cada momento.
Motor elétrico de Schaeffler.
Tres proyectos paralelos
AgiloDrive es un proyecto interinstitucional del KIT Mobility Systems Center. Bajo la administración del wbk, Instituto de Tecnología de Producción Campus Sur, los socios de investigación son el Instituto de Ingeniería de Producto y el Instituto de Ingeniería Eléctrica de KIT. Los socios industriales son Schaeffler Automotive, KG y Gehring Technologies, mientras que La Agencia Estatal de Movilidad Eléctrica de Baden-Württemberg (e-mobil BW GmbH) trabaja como institución asociada.
Los equipos trabajarán en tres proyectos parciales que discurrirán de forma paralela. El primero es un kit de producto integral cuyos métodos de desarrollo y diseño se basen en la flexibilidad. El segundo es el despliegue de las estructuras y las tecnologías para flexibilizar estos sistemas. Por último, el tercero, es la comercialización del sistema mediante la agilización de su gestión, de modo que los resultados de la investigación puedan transferirse a la escala industrial.
Cada una de estas tres fases debe ser validada técnica y económicamente. Para ello cada paso debe garantizar una alta tasa de utilización a largo plazo incluso aunque los volúmenes de pedidos de los clientes sigan siendo volátiles. Los resultados del proyecto AgiloDrive estarán disponibles para la industria y serán transferidos para su aplicación en proyectos autofinanciados.
La agilidad del sistema de producción permitirá a fabricantes de tamaño medio y a sus proveedores gestionar con éxito su proceso de transformación a la movilidad eléctrica y participar en los nuevos mercados, asegura Sebastian Schöning, CEO de Gehring Technologies.