Quien haya intentado configurar hoy un Renault Megane con motor de combustión, se habrá dado cuenta de que ya no es posible hacerlo para el mercado español. Eso quiere decir que la versión 100% eléctrica E-Tech del compacto es la única que se puede personalizar.
Como en otras ocasiones, nos hemos puesto en contacto con la marca para saber más acerca de esta decisión. Lo que nos dicen es que seguirán fabricando las unidades que tienen el pedido cerrado, pero que, efectivamente, hoy no se admiten configuraciones personalizadas de nada que no sea Megane E-Tech.
Lo que sí tienen es un stock que admite hacerse con el modelo en sus versiones diésel o gasolina, tal y como se muestra en su web y a un precio en torno a los 34.000 euros en el caso de las unidades más económicas.
Este fin comercial estaba claro, ya que oficialmente se anunció el cierre del ciclo del Megane tradicional, que tiene por delante un posible restyling que llegará a más tardar en 2025.
Será el siguiente paso lógico para ponerlo en la línea del lenguaje visual que ya hemos visto en el nuevo Renault Scenic E-Tech 100% eléctrico. Y, en todo caso, como reajuste previo a un Renault Megane de sexta generación, ya exclusivamente eléctrico desde su nacimiento y que no se espera al menos hasta 2027.
El Megane E-Tech, por tanto, se queda como único representante del segmento C en el catálogo de la marca, que se inunda de la tan exitosa apuesta por los SUV, que tantas alegrías están dando a los fabricantes en los últimos años.
Sí veremos pronto a la venta el que será el nuevo integrante de la familia Renault, denominado Symbioz. Hablamos en este caso de un SUV compacto a caballo entre el Captur y el Austral, que no deja de ser una alternativa para quien quiere un automóvil estilo Megane, pero de corte crossover.
Para cuando tengamos el futuro Renault Megane E-Tech en 2027, ya dispondrá de una plataforma que admita recargas rápidas, como la de 800 voltios que ya incorpora el nuevo Scenic E-Tech, entre otras mejoras que se desarrollen y pongan en marcha en la casa gala en los próximos años.
Antes de esto, el nuevo restyling tiene que pensar en formas de reducir costes para poner el Megane eléctrico en línea con sus rivales: es decir, por un precio por debajo de los 32.126 euros que cuesta ahora mismo su acabado de acceso evolution, ya con los 7.000 euros del Plan Moves III aplicados.
Habrá que esperar a ver lo que hacen con el paquete de baterías ofertados, ya que ahora mismo el Megane eléctrico más barato recurre al de 40 kWh de capacidad para alimentar al motor de 130 CV durante no más de 294 kilómetros por recarga.
Hay rumores de cambio de proveedor de baterías, por lo que un menor precio y el aumento de autonomía podrían estar entre las claves de esta decisión, que todavía no se ha hecho oficial. Tampoco se sabe si la estrategia a seguir será mantener el segundo nivel de potencia, de 220 CV y que incorpora la batería de 60 kWh y 427 kilómetros de autonomía.
Seguramente, veamos un baile de cifras en este sentido y un reajuste más equilibrado pensando en la competencia que tienen y tendrán por delante y en los productos que la propia marca tiene ya planificados en los próximos meses.