La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha anunciado este lunes que las furgonetas y camiones más contaminantes tendrán una moratoria de un año para poder circular por la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) del ámbito de las rondas de Barcelona, que entra en vigor el 1 de enero de 2020 y prohibirá circular a los vehículos que no tengan etiqueta ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Lo ha dicho en rueda de prensa con el conseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Damià Calvet; el vicepresidente del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) Antoni Poveda; el alcalde de Sant Adrià de Besòs, Joan Callau; el teniente de alcalde de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) José Castro; la de Cornellà de Llobregat Emilia Briones, y el de Esplugues de Llobregat Eduard Sanz, entre otros representantes de los cinco municipios afectados por la ZBE.
En concreto, esta moratoria afectará a los vehículos profesionales de transporte de mercancías -categorías N1, N2 y N3- y de personas de más de ocho plazas además del conductor -M2 y M3-, con una medida que prevén que provoque que 50.000 vehículos dejen de circular por la ZBE y que en cuatro años la reducción suba a 125.000 vehículos.
Los vehículos contaminantes que sí quedarán afectados por las restricciones -como los turismos- podrán circular por la ZBE diez días al año, y las infracciones empezarán a sancionarse en abril, con cantidades que oscilarán entre los 200 y los 1.800 euros, en función del tipo de vehículo y de la gravedad del incumplimiento y con incrementos del 30% por reincidencia, según la propuesta de ordenanza.
Esta propuesta de ordenanza se aprobó en comisión de Gobierno de Barcelona el pasado miércoles y se llevará a la comisión de Ecología en octubre, tras lo que se iniciará la exposición pública y en diciembre se someterá a la votación del pleno para su aprobación definitiva, y los otros cuatro ayuntamientos seguirán también sus trámites para que entre en vigor en enero, abarcando 95 kilómetros cuadrados.
Colau ha asegurado que esta medida marca una voluntad política que ya no tiene marcha atrás: "No es una medida contra nadie, sino a favor de la población", y ha dicho que el compromiso del Ayuntamiento, el AMB y la Generalitat es que en 15 años se reduzcan el 30% de las emisiones, tras lo que ha subrayado que la ZBE equivale a la extensión de cerca de 20 Madrid Central.
También ha enviado un mensaje de tranquilidad a los conductores: "Los tres primeros meses no se aplicarán sanciones, solo avisos; los vehículos profesionales tendrán un año de moratoria, y se establecerán hasta un máximo de diez días de autorización para circular", y ha recordado que la medida vendrá acompañada de la declaración de emergencia climática.
Ha recordado que esta medida va acompañada de otras para evitar las cerca de 350 muertes prematuras al año por culpa de la contaminación, entre las que se encuentran la mejora del transporte público y los proyectos de 'supermanzanas' y la ampliación del tranvía, así como la finalización de la L9 del Metro, entre otros.
Extenderlo a otras ciudades
Calvet ha dicho que el Govern apuesta por extender la ZBE "a todas las ciudades importantes de Catalunya", no solo como medida correctora, sino como medida preventiva, y también ha asegurado que ayudarán a los ayuntamiento y al AMB a mejorar el transporte público y al éxito de la transición sostenible del transporte de mercancías.
"Los ciudadanos deben cambiar hábitos muy arraigados", según el conseller, que ha explicado que el Govern incentivará el cambio del parque automovilístico catalán con parte de lo que recaude a través de la tasa en concepto de CO2 que emiten los vehículos privados más contaminantes, y que desplegará su segunda fase también el 1 de enero.
Transporte público
Calculan que la ZBE provocará que el transporte público gane 140.000 usuarios diarios, por lo que prevén reforzarlo para dar respuesta al incremento de la demanda, ha asegurado Poveda, que ha sostenido que los últimos años han aumentado ya la oferta y han impulsado otras medidas, como renovaciones de flotas de autobuses y la puesta en marcha de la Tarjeta Verde.
Esta Tarjeta Verde, que ofrece tres años de transporte público gratuito a quienes den de baja su vehículo contaminante, alcanzará las 5.000 personas en enero, según Poveda, que ha destacado que otros 12 municipios metropolitanos han firmado convenios para promover zonas de bajas emisiones.
Diez días al año
Ha detallado que los vehículos más contaminantes podrán circular diez días al año por la ZBE durante el horario restringido -de 7.00 a 20.00-, y ha explicado que el AMB trabaja en la creación de una plataforma en la que los conductores de estos vehículos deberán darlos de alta previamente para no ser sancionados cuando circulen en estos diez días permitidos.
Además, el AMB abrirá unas oficinas de atención a los afectados, ha explicad Poveda, que ha resaltado que están acabando la instalación de cámaras, de la señalización y de esta plataforma, "para que el 1 de enero todo esté listo para empezar" con la ZBE, que también afectará a los vehículos extranjeros.