A principios de esta semana pasaba por nuestras manos el recién lanzado Škoda Enyaq iV, el primer coche eléctrico de Škoda basado en la plataforma modular para coches eléctricos MEB del Grupo Volkswagen. Días más tarde reflejamos nuestra experiencia a bordo del coche eléctrico checo en un artículo que concluimos de manera positiva. No obstante la versión que pusimos a prueba era la iV 89 ligada al acabado interior EcoSuite, entonces, ¿merecerá la pena la versión más básica?
Es difícil encuadrar al Škoda Enyaq iV dentro de un nicho de mercado específico, pues tanto por enfoque y soluciones, como por cotas y proporciones se sitúa a medio camino entre un SUV y un monovolumen, a pesar de que la firma checa se empeñe en catalogarlo como D-SUV.
Según la propia Škoda hay un Enyaq iV eléctrico por menos de 30.000 euros, 29.900 euros para ser exactos, y se trata del iV 60, la versión de menores especificaciones técnicas. No obstante promete ser competente a nivel práctico, al menos sobre el papel, pues su autonomía homologada en ciclo WLTP es de 390 kilómetros gracias a su batería de 54 kWh de capacidad y que alimenta a su motor eléctrico (apostado en el eje delantero) de 180 CV de potencia (135 kW). En base a la potencia el buen desempeño dinámico cuando se requiera parece garantizado.
Interior del Škoda Enyaq iV 60.
Sin embargo el apunte de Škoda sobre el precio de partida de su coche eléctrico tiene truco, ya que incluye distintos descuentos y promociones de la propia marca, además del Plan Moves III, la actual ayuda estatal destinada a incentivar la compra de coches de bajas emisiones. De no restar al precio inicial el plan de incentivos que brinda el Gobierno ni los descuentos ni promociones de la marca, el Enyaq iV sube su tarifa de partida a los 39.300 euros.
Se muestra bien equipado de serie, pues entre su equipamiento estándar encontramos elementos como llantas de 19 pulgadas (ampliables hasta 21 pulgadas opcionalmente) acceso remoto, Online Infotainment, receptor de radio digital, faros y grupos ópticos traseros de LED, lunas antitérmicas, Mirror Link, ayuda de aparcamiento, sensor de luz y lluvia, consola central con Iluminación ambiental, y Front Assist con función de aviso y frenada para vehículos, peatones y bicicletas, entre otros elementos. La lista, como es habitual, es fácilmente ampliable a base de equipamiento opcional.
También es posible mejorar el aspecto y la sensación de calidad de su interior al optar por incluir en nuestro Enyaq algunos de los paquetes de diseño interior que Škoda ha lanzado. De nombres Loft (el de serie) EcoSuite, Lodge y Lounge cada uno proponer un ambiente distinto en base a diferentes colores y tapizados para el interior.
Interior del Škoda Enyaq iV 60.
En estos momentos los principales rivales del Škoda Enyaq iV por tamaño y filosofía son los Volkswagen ID.4, Ford Mustang Mach-E y Tesla Model Y, pero ninguno de ellos ofrece una versión de entrada a su gama al nivel de precios que plantea el coche eléctrico sueco. De hecho, por precios, esta versión de entrada a la gama del Enyaq se sitúa a medio camino entre los SUV eléctricos que representan los modelos del segmento B, como el Peugeot e-2008, Hyundai Kona eléctrico y Opel Mokka-e, que con los que se acercan por cotas.
Por encima de esta versión de acceso que conforma el Enyaq iV 60 quedan los Enyaq iV 80 (204 CV, 520 km de autonomía WLTP) desde 35.900 euros, Enyaq iV 80x (265 CV 4x4, 460 km de autonomía WLTP), desde 38.600 euros, Enyaq iV Sportline 80 (204 CV, 520 km de autonomía WLTP), desde 39.900 euros y Enyaq iV Sportline 80x (265 CV 4x4, 460 km de autonomía WLTP), desde 42.600 euros. En todos los casos incluyendo descuentos y promociones de la marca además de el Plan Moves III.
