Si algo diferencia a un coche eléctrico de uno de combustión, a parte de la mecánica, es la ausencia de ruido al circular, sobre todo a bajas velocidades lo que, en algunos casos, puede suponer un problema en entornos urbanos y para peatones con deficiencias auditivas. Por esa razón la Unión Europea y Estados Unidos están obligando a implementar un sonido cuando circulen por debajo de una velocidad determinada por lo que los fabricantes ya están seleccionando diferentes variantes para cada uno de sus modelos, en función del tamaño y la potencia.
En la Unión Europea será obligatorio para todos los vehículos eléctricos que salgan al mercado a partir de julio de 2019 y, a partir de 2021, esta obligación se extenderá a todos los modelos. En Estados Unidos la ley no se redactó hasta 2016, y se aplicará a partir de septiembre de 2019.
Durante el Salón de Ginebra, BMW (Mini), Mercedes-Benz, Volkswagen y Porsche han hablado sobre algunos de los pasos que han empezado a dar en este sentido. "El sonido del vehículo eléctrico es su identidad", ha dicho a Reuters a Frank Welsch, responsable del desarrollo técnico de Volkswagen. Según su criterio no puede ser demasiado intrusivo ni molesto y tiene que ser futurista evitando parecerse a algo del pasado. "No podemos simplemente agregar el sonido de un motor de combustión", añade.
Los coches eléctricos de Volkswagen tendrán diferentes sonidos diseñados para llamar la atención de los peatones. Los modelos de alto rendimiento deben tener un sonido "más asertivo, con más bajos. No puede ser un estruendo agudo, como una máquina de coser", aclara Welscho. Sin embargo, los SUV tendrán un sonido más profundo para reflejar su tamaño más grande. Volkswagen ya tiene seleccionado el sonido que incorporará el ID.3 que llegará en 2020 y todavía está modificando los tonos del resto de la gama.
Los coches eléctricos deberán emitir un sonido de alerta a baja velocidad.
Mercedes-Benz ha desarrollado para el EQC un zumbido artificial lo suficientemente alto como para advertir a los peatones que el vehículo se aproxima, pero que no molesta a sus pasajeros. Jochen Hermann, jefe de desarrollo de tren eléctrico de Mercedes-Benz afirma su intención es implementar "un automóvil lo más silencioso posible en el interior, cumpliendo las reglas obligatorias para los decibelios en el exterior". Hace ya un año que el fabricante alemán escogió el sonido entre tres preseleccionados con anterioridad. "Tomamos como modelo el Mercedes-Benz Clase S de 12 cilindros prácticamente silencioso a 10 km/h, así que queríamos un sonido que rezumase refinamiento para este modelo eléctrico".
Mercedes-AMG, su división de alto rendimiento, acostumbrada a los ruidosos escapes de sus motores de combustión, está adoptando un enfoque "poco ortodoxo" para hacer que sus futuros automóviles eléctricos sean escuchados. "Estamos trabajando con la banda de rock estadounidense Linkin Park para encontrar un potente sonido artificial", ha dicho su CEO, Tobias Moers.
BMW Group también está trabajando en el sonido que emitirá el Mini eléctrico, según ha anunciado Esther Bahne, Vicepresidenta de Estrategia e Innovación de Mini. "El sonido es definitivamente algo que dará forma a la identidad del automóvil", ha dicho.
Michael Pfadenhauer, jefe de acústica de Porsche, no tiene todavía solucionado este tema. Busca un sonido aun no inventado. "El sonido transporta las emociones de un vehículo porque da retroalimentación sobre la potencia y la capacidad del automóvil", asegura. A bajas revoluciones será un sonido que evoque comodidad, ya mayor velocidad la respuesta deberá ser más intensa para que el conductor "experimente el potencial del vehículo".