Parece que en la era de la electrificación Reino Unido también será ejemplo en cuanto a iniciativas y creatividad en cuanto a nuevos lanzamientos de coches eléctricos. En último de todos ellos es el ATAE Munro, un todoterreno británico que sobre el esquema clásico de un todoterreno ha implementado un tren de potencia eléctrico con el que es capaz de recorrer 240 kilómetros y remolcar más de una tonelada.
ATAE (All-Terrain All Electric) es una de las múltiples pequeñas empresas de Reino Unido que quieren aportar al mercado su particular visión ejecutada de manera artesanal. Otra start-up similar que días atrás pasaba por nuestra portada era de WEVC Coupé, un deportivo eléctrico inspirado en Porsche con un peso total de menos de 1.000 kilos.
El todoterreno eléctrico que conocemos hoy nace en base al vacío que según sus responsables, Russ Peterson & Ross Anderson, existe en el mercado en cuanto a conducción off-road pura, de hecho, dicen que tener un esquema eléctrico bajo la carrocería debería ser casi irrelevante, pues se normalizará pronto y el ATAE Munro está concebido en torno a la idea de servir como una herramienta resistente y fiable.
Con el ATAE Munro quieren volver a las raíces del off-road con un concepto lo más capaz y básico posible. En la empresa tienen claro a qué tipo de público quieren llegar, ya que además de clientes particulares, ven un futuro claro en fincas, parques nacionales y empresas de aventuras. Aunando todo tipo de clientes, esperan mantener su ritmo de producción cerca de las 1.000 unidades anuales.
La estética del ATAE Munro eléctrico apenas difiera de la dle Ibex F8.
Se trata de un proyecto que aún se encuentra en desarrollo, pero que esperan que para finales de este año se encuentre finalizado y que las primeras entregas tengan lugar el próximo año. Al principio del proyecto existieron dudas en cuanto a qué base debían recurrir para articular el Munro. Si bien consideraron tomar la base del Land Rover Defender clásico, existiendo ya proyectos de otras muchas empresas sobre esta base, finalmente optaron por elegir la del Ibex F8, un todoterreno que se vende en bajas cifras en Reino Unido.
A priori la estética con respecto a este no cambia demasiado, aunque lo que ocurre bajo su capó no tenga nada que ver. Al contrario de lo que ocurre en un todoterreno tradicional, su arquitectura no es un chasis de largueros y travesaños, sino que se trata de un monocasco de aluminio que ha tenido que ser modificado para poder albergar el tren de potencia eléctrico, así como la batería.
Uno de los aspectos que está por decidir será quién suministrará sus baterías, aunque tienen claro que quieren que se trate de una empresa británica, o que al menos sean de fabricación británica. El motor eléctrico, según comentan, tiene procedencia americana y rinde 210 CV junto a 350 Nm de par motor. Con ello, la empresa tiene la intención de que con una carga completa logre recorrer más de 240 kilómetros de autonomía.
De entre los principales datos que destaca la empresa, una capacidad de carga de más de 1.000 kilos y el sistema de tracción total eléctrica permanente son los que más deberían llamar la atención de sus futuros clientes. Cuenta con una caja de velocidades de dos relaciones, la primera adaptada para servir en una conducción off-road, haciendo las veces de reductora.
La empresa espera poder comercializar su ATAE Munro eléctrico en la franja de las 50.000 libras (unos 58.000 euros al cambio actual), pudiendo ofrecer versiones de mayor batería y autonomía a cambio de precios superioes.
