El lujo de las marcas alemanas siempre ha sido el santo grial de la industria a la hora de hablar del concepto premium. Cada vez son más las marcas que abusan de un término que ha adquirido un nuevo significado con la irrupción de China como gigante industrial. Muchos coches son hoy bautizados como tal, pero el concepto premium no sólo se aplica a los materiales o a las marcas. Es todo un ecosistema de privilegios. Hoy los chinos son capaces de igualar las clásicas condiciones germanas, lo que ha obligado a las marcas a cambiar de enfoque. AUDI (con mayúsculas) es la nueva compañía específica de Audi (los alemanes) para China. Su primer coche de producción ya está en el horno.
En apenas un mes abrirá sus puertas el Salón del Automóvil de Shanghái. Una muestra que con el paso de los años ha ido adquiriendo un peso significativo entre las marcas. Shanghái recibirá la visita de millones de personas que se verán atraídas por los coches más modernos jamás vistos. La mayoría de ellos eléctricos. Un espacio privilegiado que todas las marcas quieren aprovechar para presentar sus nuevas creaciones. AUDI será una de ellas, aunque todavía no tenemos muy claro qué es lo que van a presentar. Lo que sí sabemos es que los cuatro aros no estarán presentes.
Un AUDI desarrollado y diseñado específicamente para China
En Ingolstadt han pensado que esta es la mejor forma de hacerse un hueco en el extremadamente competitivo mercado chino. Audi (en minúsculas) ha perdido gran parte de su cuota de mercado en favor de las cada vez más numerosas marcas locales capaces de igualar su concepto premium. Para intentar recuperar el terreno perdido los alemanes se han asociado con el Grupo SAIC, uno de los más habituales colaboradores del Grupo Volkswagen en la región. Los chinos se encargarán de gran parte del trabajo de desarrollo, mientras que los alemanes le dan su propio toque al producto final.
Tras el lanzamiento del primer coche el mes que viene, dos modelos más están proyectados en los dos sucesivos cursos. Un SUV y un Sportback, aunque por el momento no han trascendido detalles concretos sobre ninguno de los dos. Lo que sí está claro es que Audi ha puesto mucha de su inversión en el lejano oriente. Si bien Audi acaba de cerrar su primera fábrica en Europa, en Bruselas, ha abierto su fábrica más moderna en la que espera fabricar un gran número de vehículos específicos para la región. La factoría está operada de forma conjunta entre Audi y FAW. Las primeras unidades del Audi Q6L e-tron ya se han ensamblado.
Durante mucho tiempo, Audi ha sido la única marca premium europea en estar presente en China. Lo hizo en el año 1988 y desde entonces se ha centrado en versiones específicas, generalmente con batalla larga. La irrupción de nuevos fabricantes locales ha desplazado a todas las marcas premium europeas. Ya no tienen ese símbolo de estatus del que antiguamente disfrutaban. Marcas como Mercedes y BMW están sufriendo contratiempos muy parecidos. Todas tienen que enfocar el futuro en una nueva estrategia. AUDI ha sido la primera en dar el paso. Si finalmente la jugada tiene éxito más marcas se sumarán a esta tendencia de transformación.