El Grupo Volkswagen ha elegido Audi para comenzar a probar una flota de coches autónomos en China, y más concretamente el SUV eléctrico de los cuatros aros: el Audi e-tron. El lujoso SUV alemán cuenta de serie, en su modelo de producción, con una buena dotación de asistentes a la conducción que le permiten cierto grado de conducción semi autónoma, pero Audi quiere ir un paso más allá y para ello ha elegido una de las ciudades más importantes para el coche eléctrico.
Audi ha elegido Hefei, una importante ciudad al este de China, para desplegar diez Audi e-tron completamente autónomos y comenzar allí unas pruebas que, entre otras cosas, servirán para seguir evolucionando esta tecnología.
La elección de esta ciudad no es casual, pues se trata de uno de los centros neurálgicos para los vehículos eléctricos. Hefei, en la provincia de Anhui, se ha posicionado como el lugar ideal para los fabricantes de vehículos eléctricos. Es el caso, por ejemplo, de NIO, que obtuvo una inversión de mil millones de dólares en la ciudad el pasado mes de abril. El fabricante chino, en plena expansión actualmente, tiene una fábrica en Hefei que opera con Jianghuai (socio del Grupo Volkswagen a través de JAC Motors).
Esta ciudad china, de algo más de 4 millones de habitantes, cuenta con alrededor de 80 km de carreteras con presencia de infraestructura inteligente para recarga de coches eléctricos. Las pruebas de estos Audi comenzarán el próximo mes de septiembre. Más adelante, a partir del año que viene, se abrirá al público un servicio mediante el cual los residentes de la ciudad podrán llamar a uno de los Audi e-tron autónomos usando una aplicación para el teléfono
Según el vicepresidente ejecutivo de Volkswagen China, Weiming Soh, este proyecto -llamado 'Proyecto Tigre'- busca vincular los mundos «automotriz, eléctrico y digital», algo que debería redundar en un beneficio para los consumidores. El proyecto podría extenderse a otras ciudades, según Weiming Soh, aunque de momento no se han especificado fechas.
La flota de coches autónomos de prueba contará con cinco pilares para respaldar el proyecto: los sistemas de conducción autónoma, la tecnología de coches eléctricos de batería, plataformas y servicios de movilidad, operaciones de la flota y contenido digital.