Ya os hemos hablado mucho sobre el segundo de los tres concepts que presentará Audi a lo largo de las próximas semanas. El primero de ellos fue el deportivo Sky Sphere Concept, que pudimos conocerlo con todo detalle durante el Concurso de Elegancia de Pebble Beach; próximamente conoceremos el Urban Sphere, el SUV compacto. Pero hoy era el día señalado por Audi para presentar su berlina conceptual, el Grand Sphere Concept. Después de varios teaser lanzados por Audi en los últimos días, podíamos hacernos una idea de lo que la firma tenía en mente con este modelo conceptual. Una berlina de lujo, con una mecánica completamente eléctrica y un nivel 4 de autonomía en su conducción. Este coche será el que marque el camino a seguir por futuros lanzamientos.
En primer lugar, su estética. A decir verdad, esta ha sido notablemente actualizada, quedando pocos de los cánones que Audi presenta a día de hoy, y que también veíamos reflejados en el Sky Sphere Concept. Aquí su imagen se ha limpiado y nos deja con una estética completamente nueva, con menos aristas. En el frontal destaca su enorme parrilla, algo de lo que ya hablamos en el artículo anterior, y es que siendo un vehículo 100% eléctrico una calandra de este tamaño puede suponerse como un elemento meramente decorativo. Sobre el capó se sitúa el logo de Audi retroiluminado. Por último, sus faros delanteros presentan una imagen fina y estilizada, con una firma LED en forma de pupila muy llamativa.
Su enorme carrocería es tipo Shooting Brake.
Si nos vamos hacia el perfil del Grand Sphere Concept, veremos una línea muy alargada, principalmente en su zona trasera, presentando una imagen de carrocería tipo Shooting Brake. A través de un pilar C que se prolonga hasta el final del coche, su longitud parece aún mayor que los nada despreciables 5,35 metros que ya posee. Este enorme tamaño se debe principalmente al enorme interior que presenta, aunque de esto hablaremos algo más abajo. Aquí también encontramos los retrovisores con cámaras, al más puro estilo Audi e-tron.
Ya en la trasera, al igual que sucede en el frontal, su diseño es completamente novedoso dentro de la marca, y nos muestra unos faros situados por encima de la línea de la cintura que se extienden parcialmente hacia el perfil del mismo. Aquí se aprecia con claridad el mismo diseño lumínico interior que en los faros delanteros. El logo de Audi también posee una retroiluminación aquí, sólo que esta vez es en color rojo. Posiblemente todo el protagonismo de esta zona se lo lleve su enorme difusor pintado en color negro brillante, el cual guarda una importante labor aerodinámica.
El interior hace las veces de un salón.
Metiéndonos de lleno en su interior a través de unas enormes puertas de apertura opuesta, encontramos un ambiente muy minimalista, donde la madera y los paneles planos cobran especial protagonismo. El volante se puede quitar o poner, según convenga a su conductor. En caso de prescindir de él, sobre el particular salpicadero de madera, se proyectará una pantalla de info-entretenimiento a través de la cual poder ver cualquier tipo de pasatiempos mientras que el coche nos lleva por sí sólo a nuestro destino.
Audi ha querido que el interior sea lo más parecido a un salón particular y nos deja con unos más que atractivos asientos delanteros, y un curioso sofá en la segunda fila. En los propios paneles de cada una de las puertas, se ha dispuesto el selector de temperatura para su ocupante. La consola central tiene un diseño flotante con partes de cristal, así como un pequeño y curioso recipiente donde alojar una planta. En caso de querer acoplar el volante, el particular fondo de madera, ideado como gran pantalla de entretenimiento, se convertirá en un socorrido panel de instrumentos donde visualizar toda la información relativa a nuestra conducción.
Puedes conducir o dejar que te lleve el coche.
Mecánicamente, el Audi Grand Sphere acoge un tren completamente eléctrico, con una batería de 120 kWh de capacidad que le proporciona un total de 750 kilómetros de autonomía. La recarga de esta se puede realizar a una potencia de 270 kW gracias a la tecnología de 800 V que ya se usa en modelos de producción de Audi y Porsche, con la que en apenas 10 minutos, podremos recuperar más de 300 kilómetros de recorrido. En completar una carga del 5 al 80 por ciento de capacidad le tomará apenas 25 minutos. En cuanto a su potencia, Audi especifica que posee un total de 530 kW (710 CV) y 960 Nm de par máximo, consiguiendo pulir el 0 a 100 km/h en apenas 4 segundos.
Aunque ya sabemos todos los detalles acerca de este coche, será en los próximos días, cuando se presente en sociedad durante el Salón del Automóvil de Múnich, donde se podrán desvelar más detalles del mismo. Este es un coche que aún está lejos de ser una realidad, en todos los sentidos, pero en el que Audi basará su línea de trabajo a partir de ahora.
Su gran potencia de carga hace que recuperemos 300 kilómetros de autonomía en apenas 10 minutos.
