El estado de Australia Occidental (Western Australia), ha creado un consorcio público-privado llamado The Future Battery Industries Cooperative Research Center (CRC) cuyo objetivo es posicionar a Australia como el líder mundial en la fabricación y suministro de baterías para vehículos eléctricos. La base de esta iniciativa es un centro de investigación , que se establecerá en 2019, respaldado por la industria privada con 135 millones de dólares australianos (85 millones de euros) que además contará con el respaldo del Gobierno Federal.
La transición a los sistemas alimentados por energías renovables y el incremento de la oferta de vehículos eléctricos está impulsando la demanda de baterías para el almacenamiento de energía. The Future Battery Industries CRC estudiará las fortalezas y debilidades de la industria australiana con el fin de valorar su capacidad para responder a este crecimiento mediante la creación de oportunidades de negocio para procesar, fabricar y suministrar baterías. Este despliegue brindará a las arcas australianas 2.200 millones de euros durante los próximos 15 años.
Tim Shanahan, presidente de The Future Battery Industries CRC ha explicado que el consorcio tiene un plan de seis años para abordar las brechas identificadas en la cadena de valor de su industria.
El consorcio tiene como objetivo crear las herramientas y tecnologías necesarias para asegurar que Australia lidere el camino de la industria de baterías, desde la extracción y el procesamiento hasta la fabricación y el despliegue en los hogares, las comunidades y la industria incluyendo además de su posterior reciclaje y reutilización. También ofrecerá asesoramiento para el desarrollo de las políticas, las normas y las regulaciones gubernamentales que ayuden a guiar la transformación energética hacia las energías renovables.
The Future Battery Industries CRC investigará como aumentar la eficiencia en la extracción y el refinamiento de los minerales que forman las baterías. Facilitará los pasos a seguir para la fabricación y prueba de los prototipos de baterías. Australia cuenta con importantes recursos naturales de minerales y metales para la producción de cátodos, entre ellos el litio, el níquel y el cobalto.
En todo momento se garantizará la trazabilidad y procesos de extracción ética y segura contando siempre con fuentes acreditadas. Las exportaciones de litio australiano aumentaron de 104 millones de euros en 2012 a 692 millones de euros en 2017, y se espera que aumenten hasta los 976 millones de euros en 2020.
Karen Andrews, ministra de Industria, Ciencia y Tecnología anunció que el consorcio estará liderado por la Universidad Curtin y apoyado por 58 socios industriales que aportarán 25 millones de euros en efectivo. Por su parte, el gobierno australiano ha comprometido 22 millones de euros. Además, el Gobierno del Estado de Australia Occidental ha completado la financiación con un fondo de otros seis millones de dólares a los que se suman otros 52 millones en compromisos en especie por parte de la industria, el gobierno y los socios de la investigación.