Recientemente publicamos la prueba de nuestra experiencia con la Super Soco CPX, un scooter eléctrico de corte urbano que presume de comodidad y solvencia para el día a día que tampoco se resiste a adentrarse puntualmente en autovía, pues a pesar de su ligero peso mostró comodidad y aplomo en este tipo de vías rápidas. Quedaba saber, pues, cómo se desenvolvió en nuestra particular prueba de autonomía.
Para aquellos que quieran saber sobre nuestra conclusión acerca de la Super Soco CPX en términos generales, pues, deben acudir a la exhaustivo artículo dedicado a ello, pues estas líneas se centrarán únicamente en describir cómo fue el gasto de la batería en nuestro recorrido de referencia.
Una prueba de autonomía que llevamos a cabo en la ciudad de Málaga y en la que ya hemos puesto antes a prueba a la Wellta Ártica, así como a la Super Soco TC Max, con resultados en ambos casos satisfactorios, aunque siempre por debajo de lo que anuncian sus respectivos fabricantes en primera instancia.
Super Soco CPX eléctrica.
Antes de entrar en materia y ver cómo fue el gasto de batería durante el recorrido, hemos de contextualizar al sujeto de hoy en base a sus características técnicas. La Super Soco CPX es el modelo más voluminoso de todos cuantos Super Soco comercializa en España, y se sitúa por planteamiento sobre el otro scooter de la firma, la CUX.
Tiene un motor eléctrico de 4 kW de potencia que es alimentado por una batería de 2,88 kWh de capacidad. Es una cifra calcada a la de la Wellta Ártica con la que conseguimos alcanzar 69 kilómetros hasta ver un 2 % de carga en su marcador.
Batería, cuadro de mandos y llave de la Super Soco CPX eléctrica.
El hecho de que la Ártica con la misma capacidad consiguiera esos algo más de 69 kilómetros nos indicó que probablemente la CPX superase esta distancia, pues la Ártica a pesar de sobre el papel tenga la misma potencia que el modelo de Wellta, la Super Soco entrega la potencia de manera completamente distinta. Con la Super Soco siendo más tranquila y pausada cuando de acelerar se trata, todo hacía indicar que superaría en algún que otro kilómetro a la Ártica.
El recorrido
El recorrido es un circuito urbano trazado por nosotros mismos en la concurrida ciudad de Málaga, abordando el escenario de uso más realista para una motocicleta eléctrica de corte urbano, e iniciando siempre el mismo bajo la premisa de agotar la batería de una sola atacada.
Como en las anteriores ocasiones, nuestra intención al dar comienzo en esta particular prueba de autonomía es la de movernos al mismo ritmo que el resto del tráfico, y practicando un pilotaje no necesariamente eficiente. Es decir, no vamos a entrar a practicar un estilo de conducción que favorezca la autonomía, así como tampoco abordaremos el recorrido intentando exprimir el acelerador.
No obstante utilizaremos toda la potencia del motor eléctrico cuando sea necesario, como en los tramos de autovía, al adelantar, o incluso a la salida de algún que otro semáforo, pues se trata de emular el uso más real posible de este tipo de motocicletas, y a buen seguro quienes usen o tengan una moto eléctrica harán uso del potencial del motor eléctrico recurrentemente.
Nuestro recorrido de referencia en la ciudad de Málaga.
El recorrido trazado tiene una distancia total de 44 kilómetros y algo más de 50 al llegar de nuevo al punto de partida. Da comienzo en la ciudad dormitorio que conforma el núcleo urbano de Churriana, y a través de un enlace de pocos kilómetros en autovía se adentra en el centro de la ciudad de Málaga, para después de todo el recorrido entre las calles de ésta, salir de ella mediante el mismo tramo de autovía mediante el que accedimos anteriormente, aunque en esta ocasión debidamente acortado para desviarnos hacia el Aeropuerto de Málaga y dirigirnos al municipio de Alhaurín de la Torre.
Después de alcanzar Alhaurín y volver al punto de partida, la energía restante de la batería se consumirá a ritmo algo mayor que antes, pues mientras que abordamos recurrentemente el tramo de carretera secundaria que une la pedanía de Churriana con Alhaurín de la Torre nos moveremos a ritmos algo mayores, con velocidades de entre 60 y 80 kilómetros por hora. Ritmos constantes con los que la batería de cualquier moto eléctrica de corte urbano se siente incómoda, pues gastan más energía que a menor pauta.
Así se comportó la Super Soco CPX durante el recorrido de la prueba
Con la Wellta Ártica al acabar la prueba, que duró 69 kilómetros, la carga restante era de un 2 %, mientras que con la TC Max acabamos con un 1 % y 89 kilómetros a nuestras espaldas. Con la CPX pudimos dar comienzo a la prueba con el 100 % de su batería.
Iniciamos la prueba con una temperatura de en torno a 20 grados, lo que también le ayudará conforme a la Ártica, que tuvo que enfrentarse a la misma con unos 10 grados menos en el ambiente.
Estado de la carga al iniciar la prueba.
Al llegar al primer punto de referencia, en el faro del puerto marítimo de la ciudad, la CPX mostraba en su cuadro que habíamos recorrido casi 15 kilómetros (aunque tanto la TC Max como la Ártica marcaban unos 14 kilómetros en este mismo punto) y que para ello había necesitado un 16 % de su energía. Al compararla con el modelo de la firma española, la Ártica marcaba un 2 % más de batería, aunque he de apuntar que ésta última se resistió algún que otro kilómetro a bajar del 100 %.
Proseguimos con la prueba y después de dejar atrás el recorrido hasta el primer punto, formado con travesías por semáforos mayormente y el tramo de autovía en el que exprimimos cada moto hasta su velocidad máxima (la CPX con un servidor a bordo alcanza los 99 por hora), nos adentramos en calles más céntricas y que requieren velocidades menores.
Nuestro segundo punto de referencia es el del aeropuerto de la ciudad, y para cuando llegamos al punto exacto de parada para comprobar el estado de la carga, marcando un 53 % de la batería, que es un 4 % más de lo que la Ártica en este punto, dejando a nuestras espaldas unos 40 kilómetros de recorrido y con la expectativa, llegado este punto, de superar el kilometraje del otro scooter eléctrico.
Estado de la carga recorrida en los dos primeros puntos de referencia y distancia recorrida al restar el 25 % de energía.
Justo 3 kilómetros después de haber alcanzado el último punto de referencia la batería, y es desde este preciso momento en adelante el recorrido se vuelve menos amigable en lo relativo al consumo de energía, pues después de atravesar la localidad de Alhaurín de la Torre la velocidad media del recorrido restante se eleva sustancialmente y se ve reflejado directamente en el consumo.
Al llegar a un estado de la carga del 25 % de la carga la CPX había dejado atrás 60,2 kilómetros, y si es cierto que en base a un regla de tres todo parecía indicar que alcanzaríamos unos 80 kilómetros hasta ver el 1 % de carga, lo cierto es que la CPX en esta última parte de la prueba demostró una entrega de potencia muy distinta a la de su hermana, la TC Max.
Todo transcurrió con normalidad en lo que a entrega de potencia se refiere hasta, más o menos, el 15 % de la batería pero conforme baja desde este punto la CPX ve fuertemente mermadas sus prestaciones.
Distancia final recorrida al acabar la prueba.
Es por este hecho por lo que llegados al 8 % de la carga y habiendo recorrido unos más que aceptables 74,6 kilómetros decidimos poner fin a la prueba. No obstante no se recomienda a usuarios y potenciales compradores llegar a este punto porque en determinadas circunstancias la merma en las prestaciones puede hacer que seamos un obstáculo para el resto del tráfico.
Conclusiones
Después de poco más de hora y media de recorrer de un lado a otro la ciudad de Málaga y núcleos urbanos periféricos, la distancia total recorrida por la Super Soco CPX fue de esos 74,6 kilómetros mencionados, lo que resulta una distancia satisfactoria en base a sus 2,88 kWh de batería.
No obstante y dado que no se recomienda llegar a ver menos del 10 % de batería en el cuadro de la CPX, la lógica indica que la mayoría de usuarios cargarán la misma habiendo recorrido como máximo 70 kilómetros, lo que para un uso urbano diario debería resultar suficiente para dos días de uso para un cliente medio.
Como siempre comentamos en nuestras conclusiones, aquellos que se ciñan a un uso estrictamente urbano probablamente vean cifras de autonomía superiores a los 74,6 kilómetros recorridos por nosotros, pues la última parte del recorrido está ideada para gastar la batería a un ritmo mayor, y en definitiva poder ofrecer una autonomía final más realista que las homologadas y anunciadas por cada respectivo fabricante.
MOMA e-MTB 27.5.
Sin embargo, y si resultara que cualquier potencial cliente necesitara de una autonomía mayor, Super Soco da la posibilidad de equipar un módulo más de baterías con el que, teóricamente, s se pueden alcanzar hasta 140 kilómetros con una carga completa, si bien es cierto que la homologada con este doble paquete es de 137 kilómetros y la real final estará en torno a 125 ó 120 kilómetros. El precio de optar por este paquete extra de baterías supone subir de los 3.995 euros que cuesta la versión probada a 5.195 euros, 1.200 euros más que otorgarán un plus de distancia que nunca viene mal.
Recordar que, además, nosotros mismo incluimos a la CPX entre cinco de los scooters eléctricos más interesantes gracias al Plan Moves III, ya que gracias al plan de incentivos estatal la CPX tiene un coste final para el cliente de menos de 3.000 euros.
