Aunque el gran foco de la actualidad se sitúa sobre el ritmo en que la sociedad está adoptando el vehículo eléctrico y en qué medida las soluciones de cero emisiones satisfacen las necesidades de transporte de los ciudadanos, otro importante epicentro de novedades en ecotecnología del vehículo lo encontramos en la revolución que están viviendo la conectividad y la inteligencia artificial a partes iguales.
Hemos iniciado 2018 con un alud de novedades tecnológicas –la mayoría de ellas presentadas en el marco del CES 2018 de Las Vegas– que se pueden resumir en tres ramas diferenciadas pero interconectadas: el coche autónomo, las soluciones de movilidad alternativa y las aplicaciones inteligentes que ofrecen una experiencia de uso mejorada. El mero hecho de que una feria dedicada a la electrónica de consumo esté tan íntimamente ligada al automóvil, ya nos da una interesante pista de hacia dónde nos encaminamos.
Mientras que Toyota presentaba una plataforma autónoma pensada para el transporte público, el comercio y la logística, Nissan probó con público real una tecnología capaz de interpretar el pensamiento del conductor para predecir las decisiones que tomaremos al volante con anticipo. Nvidia, la empresa tecnológica especialista en procesadores de cálculo, creó un asistente inteligente con reconocimiento facial pensado específicamente para el sector de la automoción.
En cuanto a la conducción autónoma, las alianzas entre los grandes fabricantes y las compañías tecnológicas se suceden una tras otra, todo ello con el fin de aunar esfuerzos que permitan un desarrollo más veloz y menos costoso de vehículos capaces de conducir por sí mismos. A ello hay que añadir la necesidad de recopilar una ingente cantidad de información que deberá procesarse con buen tino para ofrecer a las compañías de movilidad un servicio de mapas actualizado "en vivo". Con ello se conseguirá un servicio más preciso, eficiente y seguro.
Si combinamos todo esto con acierto, podremos divisar en el horizonte un vehículo sin conductor, que hará tanto las funciones de ‘robo-taxi’ como las de reparto de mercancías, que nos permitirá llevar nuestra oficina con nosotros estemos donde estemos, y que contará con una tecnología altamente sofisticada para facilitar hasta el extremo la vida del usuario. Mientras tanto, hasta que esta combinación de ingredientes no sea una realidad, estas son las tecnologías que se han presentado en 2018 y que terminarán por convertir el vehículo en todo menos en lo que es hoy en día:
Nissan B2V leerá la mente del conductor
La compañía japonesa ha presentado y probado su tecnología "cerebro a vehículo" en la feria de tecnología de Las Vegas. El sistema "B2V" requiere que el conductor lleve un dispositivo sobre su cabeza que mide la actividad de las ondas cerebrales. Este transmite sus lecturas a los sistemas de dirección, aceleración y frenado, que pueden comenzar a responder antes de que el conductor inicie la acción.
Toyota e-Palette para la logística y el comercio
Toyota presentó en el CES 2018 un concepto de vehículo eléctrico y autónomo llamado e-Palette que se podrá usar para distintas funciones, desde transportar pasajeros hasta repartir pizzas. Otra funcionalidad será la de servir como centro de trabajo móvil o la de tienda a domicilio. La firma japonesa se ha asociado con varias empresas para crear la plataforma e-Palette, incluyendo Pizza Hut, Amazon, Uber y Mazda, entre otros.
Qualcomm llevará la conectividad a otro nivel
La plataforma Qualcomm Snapdragon 820Am permite a los vehículos contar con conectividad "ultrarrápida", entretenimiento "sin límites" y descargas inalámbricas, con el objetivo de aumentar la inteligencia y la percepción del vehículo para ayudar a la seguridad vial. Según la firma desarrolladora, los clientes podrán disfrutar de experiencias de inmersión en el coche con gráficos e imágenes "impresionantes" por todas partes.
MBUX: IA con realidad aumentada
El sistema de infoentretenimiento MBUX de Mercedes Benz utilizará la inteligencia artificial y una tecnología capaz de recopilar datos sobre las preferencias y necesidades del usuario. La tecnología MBUX, que estará disponible en los vehículos que se venderán a partir de este año, ofrecerá navegación con realidad aumentada, control por voz personalizado y un asistente que te ayudará a cumplir con la agenda del día.
Nvidia dará inteligencia al vehículo
El asistente inteligente de Nvidia, llamado Drive IX y controlado por el procesador Xavier, tiene capacidad de procesar 30 teraoperaciones por segundo. El sistema de asistencia inteligente de Nvidia utilizará sensores dentro y fuera del automóvil para responder a las necesidades de los pasajeros. Por ejemplo, si un conductor se acerca al automóvil con las manos ocupadas por las bolsas de la compra, Drive IX abrirá la puerta del maletero, o si el conductor se distrae, el asistente lo alertará para volver a enfocar su atención en lo que sucede en la carretera.
Controlar ‘casi todo’ por voz
Otra novedad que los fabricantes de automóviles y las empresas tecnológicas que están a su alrededor están desarrollando es la capacidad de controlar ‘casi todos’ los aspectos del vehículo mediante la voz. Seat, aunque no cuenta con tecnología autónoma conocida a día de hoy, sí disfruta de la asistente Alexa creada por Amazon, disponible en el nuevo Ateca. Por su parte Tesla, la compañía de coches eléctricos de Elon Musk, actualizará su software para permitir al conductor ordenar la mayoría de acciones a su vehículo mediante la voz.
'Robo-taxis’ y vehículos de reparto autónomos
Lyft, así como su principal rival Uber, considera que los vehículos autónomos son fundamentales para sus perspectivas comerciales a largo plazo. El año pasado, Lyft anunció planes para permitir a los desarrolladores y fabricantes de automóviles sin conductor que se conecten a su red de casi 1 millón de viajes por día mientras buscan impulsar la naciente tecnología. Mientras tanto, Aptiv adquirió la empresa de tecnología autónoma NuTonomy por 450 millones de dólares (374 millones de euros) con el fin de acelerar sus planes de suministrar a Lyft y a algunos fabricantes de automóviles asociados sistemas de conducción autónoma.
General Motors asegura que lanzará un automóvil totalmente autónomo, sin volante ni pedales, en 2019, a la espera de la aprobación regulatoria. El Cruise AV está basado en el Chevrolet Bolt y es un vehículo autónomo de cuarta generación de Cruise Automation, una startup de San Francisco que GM adquirió en marzo de 2016. El coche autónomo de General Motors, que según un reciente estudio lidera la carrera por desarrollar esta tecnología, cuenta con cinco sensores LIDAR, 16 cámaras y 21 radares que proporcionan un elevado sistema de seguridad.
Por su parte Ford empezará a probar su nueva tecnología de vehículos autónomos a lo largo de 2018 en al menos una ciudad, aunque la compañía señala que no ha cambiado su plan y que la producción de cara a su comercialización comenzará en 2021. La firma estadounidense probará los primeros prototipos autónomos con socios como Lyft y Domino’s Pizza.
A por el ‘big data’ y los mapas virtuales
Para hacer realidad la visión de una conducción 100% autónoma –el llamado nivel 5– será necesaria una cantidad colosal de información, y por el momento son varias las empresas que se están dedicando a ello.
Here ha llegado a un acuerdo de colaboración con Continental para desarrollar tecnologías que faciliten el acceso a datos precisos para lograr un transporte eficiente, tanto de personas como de productos. Continental, Bosch y un consorcio de empresas automovilísticas alemanas –incluyendo Audi, BMW y Daimler– son los principales propietarios de la compañía. Además de esto, Here encontró un aliado en Mobileye, ya que la compañía controlada por Intel y asociada a Volkswagen, BMW y Nissan utilizará la información recabada por 2 millones de vehículos para construir mapas virtuales de las carreteras que favorezca la creación de sistemas de conducción autónoma.
