El Bicing de Barcelona ha estrenado un vehículo de reposición de bicicletas propulsado con energía solar, en un prototipo en fase de pruebas para poder evaluar su rendimiento y eficiencia.
El vehículo presenta un aspecto "idéntico" a los actuales modelos eléctricos que reponen bicicletas del Bicing, y lleva incorporados cinco módulos fotovoltaicos de 365 vatios cada uno en la cubierta del remolque que se cargan cuando el vehículo está en el exterior, tanto en movimiento como parado.
Bicing y la empresa que ha desarrollado el proyecto para incorporar las placas solares a este vehículo, Azimut360, evaluarán el funcionamiento de las placas y de la autonomía del vehículo, con la previsión de tener los primeros resultados de viabilidad a mediados del año que viene.
La teniente de alcalde de Movilidad de Barcelona, Laia Bonet, ha dicho que este prototipo es "otra mejora en el servicio" de Bicing, que ha destacado como una herramienta para hacer de la bicicleta una forma de moverse habitual para muchas personas.
Para Bonet, este prototipo supone avanzar hacia otro de los retos de Barcelona: "No solo la reducción del consumo de energía, y por tanto el ahorro, sino también avanzar en la reducción de las emisiones", ha explicado.
El servicio de Bicing cuenta con un total de 30 vehículos de reposición de bicicletas con sus correspondientes remolques. Son vehículos eléctricos, con una autonomía media de entre 70 y 90 kilómetros en función del recorrido que realicen.
Su finalidad es garantizar una distribución de bicicletas lo más homogénea posible, en todas las estaciones y durante toda la jornada. Para hacerlo posible, de media, cada uno de estos vehículos recorre entre 12 y 14 estaciones durante cada uno de los tres turnos establecidos en horario de mañana, tarde y noche.
La incorporación de placas solares a estos vehículos auxiliares permitiría hacer aún más sostenible el servicio de Bicing, reduciendo su consumo eléctrico.