BMW tiene ante sí un trabajo nada sencillo. Los alemanes cuentan con una dilatada experiencia en el campo de la electrificación, pero saben que tienen que seguir demostrando que, hoy por hoy, son prácticamente los únicos en plantar cara de tú a tú a la todopoderosa Tesla. Los próximos años se presentan claves en ese juego de estrategias y el BMW i5 jugará un papel fundamental en la gama. Sus nuevas fotos apenas desvelan cómo será el diseño definitivo, pero demuestran que el desarrollo está a punto de concluir.
Fue hace prácticamente un año cuando descubrimos por primera vez al i5 en sus primeras fases de prueba. Por entonces, muchos eran los datos desconocidos y, poco a poco, a lo largo de este año, se han desvelado interesantes detalles de cómo será la berlina eléctrica media de la casa. BMW tiene muchas esperanzas puestas en ella. Aspiran a conquistar una cuota de mercado eléctrico del 15% a finales de este mismo año y a alcanzar un 80% a finales de la década. Por el momento, las ventas concuerdan con las previsiones, pero para llegar al volumen esperado se necesitan más modelos.
El i5 no será el primero en emplear la esperada plataforma Neue Klasse. Ese privilegio le corresponderá al BMW i3 en formato berlina que verá la luz en 2025. Sin embargo, no hay que rebajar expectativas con respecto al i5 porque los datos demuestran que será uno de los eléctricos más punteros del mercado. La plataforma CLAR modificada le permitirá incorporar un gran paquete de baterías de iones de litio con el que podrá ofrecer hasta 600 kilómetros de autonomía eléctrica. Un rango que le equipara a sus dos máximos rivales, el Tesla Model S y el Mercedes EQE.
Siguiendo la misma filosofía que con el BMW i4, los diseñadores nos presentan una estética bastante conservadora. Alejado de la extravagancia del BMW iX, los de Múnich saben que este será un coche de volumen y que no pueden arriesgar con la presentación. No habrá riñones verticales, aunque el formato será más grande de lo que actualmente podemos ver en el BMW Serie 5. Las versiones térmicas y eléctricas prácticamente serán idénticas a excepción de pequeños detalles. Tampoco habrá faros divididos como ocurre con los BMW i7 y BMW X7.
A pesar del conservadurismo estético, BMW ofrecerá diferentes versiones de su tren de potencia eléctrico. Unidades con uno o dos motores que desviarán toda la potencia al eje trasero o la repartirán entre las cuatro ruedas. Tal y como supimos hace tiempo, la versión más extrema llevará la denominación de BMW i5 M60 y se espera que comparta parte de su desarrollo con la versión correspondiente del iX. De confirmarse este hecho, estamos hablando de una potencia superior a los 600 CV con dos motores eléctricos instalados, uno por cada eje.
Las fotos desveladas por BMW demuestran que el lanzamiento es prácticamente inminente. El i5 sigue quemando etapas en su fase de desarrollo, aunque no será hasta finales de año o principios del curso que viene cuando aterrice en los concesionarios. Teniendo en cuenta los ya mencionados rivales, podemos estimar un precio de salida próximo a los 75.000 euros, pudiendo superar la barrera de los 100.000 en las versiones más completas y potentes. Poco tiempo después llegará al mercado la variante Touring con formato familiar que empleará la misma arquitectura y las mismas unidades mecánicas.