Cada día vemos como aumenta sistemáticamente la oferta sobre coches eléctricos de la práctica totalidad de marcas existentes a día de hoy. La demanda de estos vehículos también está en franco aumento pues en los últimos meses hemos podido ver como las ventas de algunos de estos modelos 100% eléctricos ya superaba a la de ciertos coches homólogos movidos por motor térmico, de hecho, en BMW han tenido que pausar el ritmo de pedidos de sus nuevos modelos i4 e iX, ya que la marca no da abasto para satisfacer dicha demanda.
Es decir, el mercado del vehículo eléctrico se encuentra ahora mismo con mejor salud que nunca, pero Nicolas Peter, el hombre a cargo de Finanzas en BMW Group, ha hecho referencia en una reciente entrevista a la decadente red de recarga de estos vehículos. Según explica el directivo de BMW, la red actual no es suficiente para dar cobertura a la enorme demanda que existe sobre los coches eléctricos, algo que terminará repercutiendo directamente sobre sus ventas y, por ende, sobre la propia economía de los diferentes fabricantes de automóviles.
El esfuerzo que han realizado las diferentes marcas en el desarrollo de estos coches eléctricos es notablemente elevado, por lo que la preocupación de los diferentes directivos está puesta directamente sobre la capacidad de abastecimiento de estos. Y lo peor es que no hay visos a que esta tendencia tenga remedio efectivo en los próximos años, ya que la demanda de coches eléctricos seguirá aumentando a la misma vez que las restricciones a los vehículos de combustión se incrementan, pero todo soportado con una red de recarga ya de por sí bastante deficiente para los niveles de ventas de eléctricos a día de hoy, cuanto más dentro de unos años donde se espera multiplicar las cifras actuales.
Para remediar esto, según especificó Nicolas Peter, se necesita con urgencia una rápida expansión de las diferentes infraestructuras, especialmente en áreas urbanas densamente pobladas (donde se llevará a cabo un mayor desembarco de eléctricos), y en puntos estratégicos de autopistas donde poder recargar en caso de encarar viajes de larga distancia. Añadiendo a esto, aseguró que tampoco será suficiente con aumentar el número de puntos de recarga sino que estos también deberán ser rentables y capaces.
El responsable de la firma de Múnich ha apuntado directamente como responsables a los políticos que no garantizan la efectividad de los primeros pasos de esta tecnología a través de subvenciones o ayudas a que este medio se mantenga y evolucione por sí solo. “Al fin y al cabo, ¿quién va a construir nuevos puestos de recarga mientras que los ya instalados no resultan rentables para sus propietarios?”, especifica Nicolas Peter, incidiendo sobre la falta de apoyos políticos que incentiven la adquisición de coches eléctricos, los cuales especifica que únicamente serían necesarios hasta que el propio mercado comience a regularse de forma autónoma y se rentabilice por sí solo.
Esta no es la primera vez que desde la directiva de la casa de Múnich apuntan como responsables directos de la falta de infraestructura a los diferentes dirigentes políticos de cada territorio, ya que creen que estas no se podrán desarrollar sin una mayor participación y apoyo de los órganos rectores que han sido los que han desencadenado a un ritmo frenético la obligada evolución y desarrollo del mercado eléctrico, cuando la infraestructura alrededor del mismo era notablemente escasa.