Es un hecho objetivo que BMW va a la cola en lo que a coches eléctricos se refiere si lo comparamos con sus rivales más directos, Mercedes-Benz y Audi, a pesar de que se adelantó a estas con un eléctrico de volumen -el BMW i3- en el año 2013. BMW ha tenido una política más laxa o menos ambiciosa en materia de electrificación, pero ha decidido ponerse las pilas y lanzará cuatro nuevos modelos de batería en los próximos dos años.
Esos cuatro nuevos modelos no incluyen, por supuesto, los BMW i4 y BMW iX. Estos dos modelos ya están a la venta (desde 59.900 euros y 85.850 euros, respectivamente) pero todavía no han llegado a los concesionarios. El que sí desfila ya por la red oficial y ha empezado a entregarse a los primeros clientes es el BMW iX3, la versión eléctrica derivada del X3, un SUV con 461 kilómetros de autonomía (WLTP) y un precio de 73.300 euros.
Esa es la gama actual de coches eléctricos dentro de la marca BMW, una gama que prácticamente se duplicará en los próximos dos años según ha anunciado Oliver Zipse, el director general de BMW. «Estamos plenamente comprometidos con los coches eléctricos allí donde el uso de cadenas cinemáticas de batería tenga sentido, y es posible porque se dan las condiciones adecuadas».
Según Automotive News, los dos primeros modelos en llegar serán la versión eléctrica del BMW Serie 7 y la versión eléctrica del X1, ambas previstas para el próximo 2022. Más adelante, ya en el año 2023, llegará la versión eléctrica del BMW Serie 5, además del Mini Countryman eléctrico (recordemos que Mini pertenece al Grupo BMW).
Las Series 7 y 5 eléctricas se fabricarán en la planta de BMW en Dingolfing (Alemania), donde actualmente ya se fabrica el iX. Por su parte, la versión eléctrica del X1 y la del Mini Countryman se fabricarán junto a las versiones con motor de combustión, en Regensburg y Leipzig, respectivamente.
Mula de pruebas del BMW i7, cazado durante su fase de desarrollo.
El próximo Serie 7 eléctrico, que podría adoptar el nombre de BMW i7, seguirá el lenguaje de diseño estrenado en el BMW iX, tanto por fuera como por dentro. En el exterior predominan líneas más rectas y angulosas, una gran calandra en el frontal y los faros delanteros divididos en dos partes. En lo que se refiere al habitáculo, que presumirá del refinamiento característico del Serie 7, montará el nuevo sistema multimedia de BMW, más potente y con funciones más avanzadas, y una enorme doble pantalla con cristal curvo.
A nivel técnico y prestacional todavía no hay datos confirmados oficialmente, pero es previsible que la autonomía del hipotético BMW i7 supere los 700 kilómetros en ciclo WLTP gracias a una enorme batería que podría alcanzar los 120 kWh de capacidad, según los últimos rumores. Sea como fuere, cualquier cifra por debajo de los 700 kilómetros quedaría grandemente ensombrecida por su máximo rival, el Mercedes EQS, que homologa 770 kilómetros de autonomía.
La intención de BMW para el año 2023 es ofrecer al menos una opción eléctrica «en casi todos» los segmentos en que esté presente la marca, y en los próximos 10 años tienen previsto vender un total de unos 10 millones de vehículos totalmente eléctricos. En esa estrategia a largo plazo se incluye una generación totalmente nueva de coches eléctricos, denominada 'Neue Klasse', que estarán construidos sobre una nueva plataforma modular específica para coches eléctricos, tendrán una nueva arquitectura informática y de software y montarán baterías de sexta generación, con mayor densidad energética, mejor capacidad de carga rápida y menores costes de producción. No obstante, los primeros modelos de esta "nueva clase" no los conoceremos hasta el año 2025.
