BMW M ya está trabajando en su nueva generación de coches de altas prestaciones y totalmente eléctricos. El pasado año, la propia compañía desveló imágenes de un misterioso modelo que adoptaba la carrocería de un BMW i4, pero con el frontal de un BMW M4 CSL y una anchura mucho mayor que cualquier otro vehículo de la marca. Esto es porque dicho vehículo incorporaba un nuevo tren mecánico eléctrico que constaba de hasta cuatro motores eléctricos. Los alemanes estaban probando las capacidades de la tecnología que llegará próximamente a los coches de calle.
La marca siempre se ha caracterizado por una gama generalmente presentada como tracción trasera, ya sea en modelos deportivos o en otros de tiradas más extensas y motorizaciones lógicas. Sin embargo, todo ello comenzó a cambiar con el lanzamiento de la última generación del BMW M5, que adoptó la tracción total xDrive para descontento inicial de sus más acérrimos seguidores. No obstante, las impresiones de estos cambiaron al ver el manejo tan radical que aún así tenía.
En declaraciones del CEO de BMW M, Frank van Meel, al medio Autocar, esta misma tecnología será la que incorpore la nueva generación del BMW M2, que será totalmente eléctrico. "El secreto detrás de esto, es que tienes un controlador central (o un ordenador central) que gestiona todo: el diferencial trasero, pero también el diferencial delantero-trasero y el sistema DCS (Dynamic Stability Control)". El responsable confía en que tener un sistema que, además, coordine las relaciones entre las cuatro ruedas y sus respectivos cuatro sistemas motorizados.
BMW llama a este particular componente la "Mano de Dios". Fue inicialmente desarrollado para la implementación en coches como el BMW i8 para mediar entre el motor de gasolina y el eléctrico y asegurar una vectorización del par adecuada para cada situación.
"Si ves los coches eléctricos con cuatro motores que tenemos en desarrollo, por supuesto tendremos que usar este mismo sistema para controlar individualmente cada motor y hacer que se conduzca como un M. Con esta mecánica, el sistema puede dar incluso más posibilidades", afirmó Van Meel.
El mismo directivo aseguró que, como aún están en desarrollo, tendrán que buscar que estos modelos presenten un carácter propio, ya que el BMW i4 M50, el BMW iX M60 o el BMW i7 M70 ya han puesto el listón verdaderamente alto en todos los aspectos. "Tendremos que buscar una conducción plenamente distintiva para los modelos M auténticos".
Sin embargo, él mismo ha confirmado que para la llegada de un BMW M eléctrico y auténtico, como muchos seguidores esperan, aún pasará algún tiempo dado que estos "precisan de un desarrollo que puede llevar años para tenerlo listo".
El modelo más mencionado por el propio CEO ha sido el sucesor del recién estrenado BMW M2. Este hará uso de toda la tecnología de la que disponga la compañía y se prevé que sea todo un escaparate tecnológico, pero también de prestaciones y capacidades. Su lanzamiento todavía se intuye muy lejano, apuntando directamente hacia los últimos años de esta misma década.