¿Porqué los coches eléctricos tienen unos diseños tan distintos a los de los vehículos de combustión? Esta es una pregunta más que habitual cuando nos referimos a vehículos eléctricos como el Nissan Leaf de primera generación o el BMW i3. Pero esto va a cambiar –o más bien está cambiando– con la llegada de cada vez más opciones con propulsión eléctrica al mercado. El Leaf de segunda generación ya hizo un cambio radical respecto a la primera, y BMW está trabajando en nuevos coches eléctricos con un diseño mucho más convencional que el del i3.
Según Adrian Van Hooydonk, director de diseño de BMW, los coches eléctricos se están convirtiendo en un producto convencional, alejándose de lo extraordinarios que eran hace unos años, por lo que ya no tiene sentido crear diseños tan diferentes y extravagantes para este tipo de vehículos. "Los clientes de BMW quieren un coche dinámico, independientemente de si sea eléctrico o no", dijo el directivo en una entrevista a Autocar, "así que cada vez hay menos motivos para que tengan un aspecto diferente".
BMW iX3 Concept.
Por otro lado, desde hace bastante tiempo existe el debate entre diseñadores acerca de la voluntad del cliente de comprar un coche distinto. Muchos de ellos opinan que los precursores de la movilidad eléctrica adquirieron un coche eléctrico por su compromiso con el respeto al medio ambiente, pero otros creen que existe un componente de distinción que se perdería si los diseños fuesen convencionales. Si un coche eléctrico luciese idéntico a otro con motor de combustión no habría forma de enviar un mensaje al mundo exterior en pro del respeto al medio ambiente.
El cambio del punto de vista en BMW, que hasta el momento nos había sorprendido con diseños tan excepcionales como el del iVision Dynamics o el Vision iNext, es resultado de que el público objetivo de la marca bávara ha pasado de ser los primeros adoptantes (o early adopters) a la mayoría temprana ( o early majority). La mayor diferencia entre ambos grupos de población está en que los primeros se interesan especialmente por las novedades tecnológicas en sus etapas iniciales de desarrollo y están dispuestos a adquirirlas a pesar de que no hayan llegado a su madurez. En cambio, los segundos, son la primera gran mayoría en interesarse por un producto innovador que ya está alcanzando su etapa de consolidación en el mercado y que se ha convertido en una solución óptima a una necesidad.
BMW iNext Concept.
Dejando la terminología de mercadotecnia a un lado, la realidad es que BMW ya ha confirmado que dejará de desarrollar diseños individuales, costosos y complicados, como lo son las estructuras de carbono y los paneles de aluminio que emplean los modelos como el i3 o el i8. Para su próximo coche eléctrico, el iX3, BMW creará una versión eléctrica basada en el diseño actual de SUV que no se diferenciará del modelo de combustión más que por pequeños detalles, como la calandra sin perforar o las llantas de diseño específico. El BMW iX3 Concept que se presentó en Pekín en abril del año pasado es buena prueba de ello. La misma estrategia se empleará para el lanzamiento del Mini eléctrico, también del Grupo BMW, que será presentado antes de finalizar el año.
BMW iVision Dynamics Concept.
Por otro lado, para futuros lanzamientos enfocados a segmentos superiores a los mencionados, BMW optará por un término medio en cuanto a la agresividad de sus diseños. El BMW iNext se presentó como concept car y adelanta el aspecto que podría tener un crossover eléctrico de mayor tamaño al iX3 que llegará al mercado en 2022. Los ángulos afilados de su carrocería y la ausencia del pilar B, de forma idéntica al i3, son sus rasgos característicos. Sin olvidar el BMW iVision Dynamics, otro concepto bien diferenciado, con líneas aerodinámicas y poco convencionales que sirven como adelanto del aspecto del i4, una berlina eléctrica de la familia BMW i con fecha de lanzamiento similar.