Tras cerrar un 2023 de éxito, BYD quiere concluir el 2024 como el mayor fabricante de coches eléctricos del mundo. Los chinos quieren arrebatarle la corona a Tesla y están haciendo enormes esfuerzos para que así sea. El año ha comenzado especialmente intenso en cuanto a lanzamientos y descuentos. BYD ha promovido una nueva guerra comercial que, hoy por hoy, ninguna otra compañía es capaz de igualar. A las importantes novedades ya presentadas como el BYD Dolphin Mini se suma ahora el restyling de uno de sus modelos más representativos, el BYD Han. La versión de 2024 incluye algunas mejoras importantes, pero, sobre todo, descuentos muy agresivos.
Aunque en Europa no hemos empezado a disfrutar de la berlina hasta el año pasado, en China lleva ya cuatro años a la venta. El Han fue uno de los primeros lanzamientos eléctricos de BYD. Apoyado sobre la plataforma 2.0, sus dimensiones no cambian con respecto a la edición anterior. Con 4,99 metros de largo, 1,91 metros de ancho y 1,49 metros de alto, se integra en la escala superior del segmento D, junto con rivales tan importantes como el Tesla Model S, el Volkswagen ID.7 o el Mercedes EQE. Su distancia entre ejes se mantiene en los 2,92 metros, batalla suficiente como para ofrecer un generoso espacio interior para un máximo de cinco pasajeros.
Un 14% más barato a pesar de las novedades tecnológicas y técnicas
Gran parte de las actualizaciones recibidas por el Han se centran en el apartado tecnológico. La presentación interior no varía. Se mantiene el esquema de doble pantalla con un panel central giratorio de 15,6 pulgadas. Sí cambia el rendimiento del sistema multimedia gracias al empleo de un chip más potente, Horizon Journey 5. Con él, la berlina suma nuevas capacidades autónomas que completan el ya de por sí buen equipo de asistentes DiPilot 100 de BYD.
Las nuevas funcionalidades son el aparcamiento inteligente y el sistema de conducción autónoma avanzado en autopistas. En todo lo demás, el Han se mantiene exactamente igual al modelo que ya conocíamos.
En cuanto a la parte técnica y mecánica, los chinos aseguran que han mejorado la arquitectura eléctrica, pasando de los 620 V de la edición anterior a los actuales 800 voltios. Esto permite que la berlina reduzca sus tiempos de carga gracias a una potencia asumible más elevada, hasta 155 kW en corriente continua. Ahora, el Han puede recuperar del 30% al 80% de la capacidad de su batería en apenas 25 minutos.
Mecánicamente hablando no hay cambios. La versión tope de gama, la única a la venta en Europa, ofrece 510 caballos de potencia y 700 Nm de par motor. En China, BYD propone diversas variantes mecánicas con autonomías entre los 506 y 715 kilómetros.
Nuestro mercado seguirá disfrutando de la unidad con 520 kilómetros de autonomía al no producirse cambio alguno en la batería, algo que sí ha ocurrido con el BYD Tang, que ha incrementado en 130 kilómetros su rango operativo gracias a un considerable aumento en la capacidad de la pila.
A pesar de esta retahíla de modificaciones, la novedad más sustancial del nuevo Han es la reducción de precios, un 14% menos que la edición anterior. El modelo más barato en China arranca sus tarifas en los 179.800 yuanes, apenas 23.000 euros al cambio. La unidad europea con motor dual se ofrece desde los 249.800 yuanes, que vienen a ser 32.000 € si aplicamos el cambio de divisa. Por ahora, no se sabe cuándo llegará a Europa el nuevo Han ni qué precio tendrá cuando lo haga.