BYD ha aterrizado con fuerza en el mercado europeo. Hace unos días presentaba oficialmente a la prensa los tres modelos que forman la avanzadilla de su oferta comercial: Atto 3, Tang y Han, dos SUV y una berlina que pretenden plantar cara a las marcas más importantes de los segmentos C y D. Si bien estas tres primeras opciones no se centran en el mercado de los vehículos asequibles, sino que pretenden competir con las marcas premium, la cartera del fabricante chino es tan grande que pronto llegarán otros modelos con precios contenidos y con la intención de conquistar el mercado de masas.
Presentado en China el pasado 3 de abril, el BYD e2 tiene potencial para convertirse en una pesadilla para modelos compactos que hoy no tienen rival en Europa como el MG4. Su lanzamiento en China, desvela un hatchback 100% eléctrico que, si bien inicialmente estaba destinado al sector de los viajes compartidos, ha recibido un lavado de cara para adaptarlo al canal de los particulares. Sus características de diseño, que lo colocan como un vehículo familiar, hacen factible que pueda tener sentido su comercialización en un mercado más potente.
Las dimensiones del BYD e2 son 4.260 mm de largo, 1.760 mm de ancho y 1.530 mm de alto. La distancia entre ejes es de 2.610 mm, 20 mm más larga que el modelo al que sustituye. Por lo tanto, su tamaño se corresponde con los compactos del segmento C como el Volkswagen ID.3, el Renault Megane o el MG4, este último destacado por su precio, muy inferior a los otros dos, lo que lo convertirá en su rival más cercano, si es que finalmente aterriza en Europa.
El diseño del BYD e2 presenta un frontal actualizado respecto a la versión anterior, con una nueva parrilla completamente cerrada y con el logotipo de la marca BYD en grande directamente colocado sobre la carrocería, sin el fondo ovalado opaco anterior. Los faros delanteros son ahora mucho más estrechos y largos, conectados entre sí por una franja negra horizontal que recorre toda la parte baja del capó. Lo completan tres tomas de aire, dos laterales y una central, que se encargan de llevar la ventilación a los componentes mecánicos internos, como la batería y el motor. El esquema de los faros unidos se repite en la zaga con los pilotos traseros entre los que destaca el nombre completo de la compañía ‘Build your dreams”.
El BYD e2 está construido sobre la ePlatform 3.0 de la marca, una arquitectura desarrollada únicamente para modelos eléctricos, lo que le permite acceder a las últimas tecnologías de la firma. Según indica BYD, ha desarrollado numerosos módulos que son clave para el sistema de accionamiento eléctrico que se incluye en la plataforma. Estos componentes son más pequeños, más ligeros, más potentes y más eficientes. Así, por ejemplo, el módulo de accionamiento 8 en 1 es capaz de lograr una eficiencia del 89%.
Cuenta con un motor eléctrico síncrono de imanes permanentes capaz de 70 kW (94 CV) de potencia. Lo alimenta una batería Blade, también desarrollada por el fabricante chino que estará disponible en dos capacidades: 33,2 kWh y 43,2 kWh, que se corresponde respectivamente con 301 km y 401 km de autonomía, según el ciclo de homologación chino, similar al antiguo NTSC europeo.
Por último, y aunque no se han publicado las imágenes oficiales de su interior, las fotos espía filtradas con anterioridad muestran que el BYD e2 2023 contará con dos pantallas. La situada tras el volante, de instrumentación, es de 8,8 pulgadas de diagonal. La que se sitúa en el centro del salpicadero es giratoria y podrá ser de 10,1, para las versiones de entrada, o de 12,8 pulgadas para los de gama alta.
Por ahora, no se conoce el precio al que estará disponible en China, donde se supone que rivalizará con los modelos más económicos de su tamaño. Una esperanza, por lo tanto, para el mercado europeo en el que son necesarios coches eléctricos asequibles que aviven la competencia en el segmento en que el volumen de ventas es mayor.
