Vivimos en una era de tiempos cambiantes y lo peor de todo es que la situación cambia tan deprisa que hay muchas veces que no da tiempo ni a actuar. En cuestión de unos meses el Porsche Taycan ha pasado de ser uno de los coches eléctricos más queridos y buscados del mundo a prácticamente no interesar a nadie. En Alemania andan revolucionados ante una caída considerable en las ventas globales. Entre enero y septiembre la empresa matriculó un total de 226.026 coches en todo el mundo. Una cifra considerable que supone un 7% menos de lo que cosecharon el año pasado. Mientras tanto, los ingenieros alemanes ya trabajan en una nueva generación eléctrica para el 2027.
Porsche alega varias razones importantes para determinar este “descenso moderado”. El factor principal es la disponibilidad limitada de producción. Varios de sus modelos como son el Panamera, el 911, el Macan y el Taycan se encuentran en plena fase de lanzamiento. Los cuatro han sido actualizados en apenas unos meses y como es lógico la nueva producción todavía no ha alcanzado los niveles óptimos. Sin embargo, el pesimismo es real ya que ante el lanzamiento de un nuevo producto siempre hay un pico en ventas por el simple deseo de tener lo último y lo mejor. Más si cabe cuando hablamos de una marca como Porsche.
En Alemania temen que sus eléctricos ya no tengan ningún interés
Si bien esta es una razón de peso, Porsche debe estar más que preocupada por la situación de su primer y más popular coche eléctrico. El Taycan fue en su día el impulsor de un cambio de mentalidad. Los escépticos de la electromovilidad aseguraron que su vida comercial iba a ser lamentable, pero nada más lejos de la realidad. En poco tiempo, Porsche alcanzó la impresionante cantidad de 100.000 unidades fabricadas y vendidas. Un éxito de precocidad para la marca. A finales del año pasado, incluso en la fase de desescalada de la anterior generación, los alemanes registraron el mejor trimestre comercial de la historia del Taycan. 12.744 unidades vendidas entre octubre y diciembre.
Ahora la situación es bien diferente. Entre enero y septiembre de este año Porsche ha vendido un total de 14.042 unidades del Taycan en todo el mundo, lo que supone una increíble reducción del 50% en el volumen total con respecto al mismo periodo del año pasado. La situación preocupa en los despachos de Stuttgart ante la más que posible transferencia de problemas al que siempre ha sido el coche más vendido de Porsche, el Macan. Cabe recordar que los alemanes han lanzado una nueva generación, 100% eléctrica, hace apenas unos meses. Los primeros coches están llegando ahora a los concesionarios y muchas esperanzas están puestas en él.
A pesar de las buenas cualidades del Macan, Porsche tiene motivos para preocuparse. No saben si la caída en las ventas se centran exclusivamente en el Taycan o si por el contrario se relacionan con la movilidad eléctrica en general. China es el mayor mercado del mundo y allí los alemanes han registrado una caída del 29% en el volumen de ventas. No es de extrañar que Porsche reduzca una vez más la producción del Taycan ante la falta de demanda. Resulta curioso que los modelos que más incrementan su participación sean los 718 Boxster y Cayman. Su fin está cerca. La próxima generación será 100% eléctrica y ante este cambio las ventas a nivel global han crecido un 10%.