La pick-up eléctrica de hidrógeno de Nikola no se va a fabricar, no al menos bajo el paraguas de General Motors como estaba previsto. Nikola y General Motors han actualizado la relación contractual que habían puesto en marcha el pasado mes de septiembre, una actualización de los términos que ha dado lugar a la cancelación del proyecto de la Nikola Badger eléctrica.
La Nikola Badger no verá la luz, no si de General Motors depende
El pasado mes de septiembre, ambas compañías llegaron a un acuerdo mediante el cual General Motors adquiría el 11 % de Nikola y se comprometía a fabricar la pick-up de hidrógeno de Nikola, la Badger. Sin embargo, esto último ya no será así: General Motors ha reculado y ha cancelado su intención de fabricar la pick-up eléctrica de Nikola, que prometía más de 960 kilómetros de autonomía.
El acuerdo del pasado septiembre fue, francamente, un movimiento bastante extraño. Nikola solamente ponía sobre la mesa un puñado de promesas y el diseño de los vehículos; General Motors pondría todo lo demás. No sólo había un desequilibrio entre las partes; días después de anunciar el acuerdo, salieron a la luz unas acusaciones de fraude sobre Nikola aportando numerosas pruebas, que echaron más leña al fuego y acabaron provocando la dimisión del CEO, Trevor Milton.
El acuerdo sigue en pie: General Motors suministrará pilas de combustible a Nikola
No obstante lo anterior, el acuerdo entre ambas compañías sigue en pie. Aunque se ha cancelado el proyecto de fabricar la Nikola Badger, en el memorando de entendimiento de ambas compañías (no vinculante y que debe ser negociado antes del acuerdo definitivo) se recoge la intención de General Motors de suministrar su pila de combustible Hydrotec para los camiones eléctricos de Nikola. General Motors prevé que el acuerdo acabe teniendo un coste superior, pero Nikola deberá pagar por adelantado la inversión de capital necesaria.
Según el comunicado, las dos empresas también discutirán el uso del sistema de baterías Ultium de General Motors en los camiones eléctricos de gran tonelaje de Nikola. El gigante estadounidense, uno de los grandes de Detroit, ha llamado 'Ultium Drive' a la tecnología de baterías, motores y transmisiones y que se montarán en los futuros vehículos eléctricos de sus diferentes marcas.
Nikola, bajo la eterna sombra de la duda
Un detalle sigue llamando la atención en este acuerdo y es que General Motors decida suministrar a Nikola sus pilas de combustible y su nueva tecnología de baterías, cuando precisamente el objetivo de invertir en Nikola era tener acceso a sus tecnologías -supuestamente avanzadas- en materia de propulsión eléctrica y almacenamiento energético (baterías).
Además de la Badger y los camiones eléctricos, Nikola aspira también a poner en marcha una red nacional (en Estados Unidos) de repostaje de hidrógeno para vehículos eléctricos con pila de combustible. Un compendio de planes a futuro pero que, de momento, ninguno ha llegado a hacerse realidad.