El constructor y diseñador de barcos Silent-Yachts ha mostrado nuevos detalles del SILENT-60, un catamarán eléctrico movido por dos motores cuya energía eléctrica proviene de los paneles solares y de un sistema de baterías intermedio. Si bien los barcos que esta empresa son ya de por sí diferentes al resto de la competencia por su sistema de propulsión, ahora, en el SILENT-60 se incorpora una nueva tecnología basada en un ala de cometa que genera energía limpia adicional suficiente para las necesidades del barco, lo que permite recargar las baterías con los paneles solares durante la navegación.
Silent Yachts es reconocida en el sector de la navegación de lujo por crear embarcaciones únicas movidas por sistemas eléctricos totalmente sostenibles que se alimentan de energía solar. Michael y Heike Köhler, sus dos fundadores, han aprovechado su experiencia en la navegación para crear un sistema solar eléctrico para la propulsión náutica. Su trabajo de investigación sobre tecnologías solares culminó en 2004 cuando, tras reunir más de cinco años de datos de navegación, construyeron el SolarWave 46, su primer catamarán eléctrico completamente autosuficiente.
En base a su diseño y tras cinco años de navegación, en 2016 comenzó la producción en serie de yates solares eléctricos completos con el SILENT 64, que en 2018 fue el primer catamarán propulsado por energía solar producido en serie que cruzó el Atlántico, desde Cartagena hasta Barbados en 16 días. En 2020, Silent Yachts y el Grupo Volkswagen anunciaron una asociación para el suministro por parte del grupo alemán de los componentes y baterías de un nuevo yate de casi 17 metros de eslora, el SILENT-55 , que sería diseñado con la ayuda de Cupra y emplearía la plataforma MEB de Volkswagen.
A principios de este año, Silent Yachts lanzó un nuevo catamarán, el SILENT-60, una generación más potente y renovada del SILENT-64, que además de la tecnología solar emplea técnicas de propulsión todavía más sostenibles.
El SILENT-60 es un catamarán eléctrico de 18 metros de eslora, 9 metros de manga y 0,93 metros de calado. Sobre su cubierta cuenta con 42 paneles solares que producen 17 kWp que se almacenan en una batería de ocho módulos de 286 kWh de capacidad. Con ellas se alimentan dos motores eléctricos de 340 kW de potencia que se encargan de propulsar la embarcación de manera silenciosa y sin emisiones contaminantes. Como medida de seguridad, el SILENT-60 está equipado con un generador y 1.000 litros de combustible. Sin embargo, según los propietarios de los barcos de Silent-Yachts, casi nunca han tenido que usarlo porque tienen suficiente con la energía solar.
El ala de cometa tira del SILENT-60 permitiendo que los paneles solares recarguen la batería.
Además, Silent Yachts ha incluido una opción adicional montando un ala de cometa que aumenta la autonomía de la embarcación y lo hace todavía menos contaminante. Según indica el comunicado de prensa de la empresa, el SILENT-60 será en primer barco en el mundo que equipe un ala de cometa que puede tener 9 o 13 metros cuadrados de superficie, aunque esta opción también estará disponible en el resto de sus embarcaciones.
Tras desplegar la cometa sobre la superficie del agua, el yate se separa de ella para posteriormente levantarla y hacer que alcance su altura de vuelo óptima. Una vez en esa posición la cometa comienza a trazar una figura en forma de "8" en el cielo, generando un extra de energía para tirar del yate. Michael Köhler, uno de los fundadores de Silent Yachts explica que las principales ventajas de una cometa sobre un sistema de vela convencional son dos. La primera es que no arroja sombra sobre los paneles solares y la segunda que no precisa de un mástil para ubicarla.
La cometa es capaz de generar hasta 10 veces más potencia por metro cuadrado que una vela tradicional y ahorrar alrededor de 1,5 toneladas de peso en comparación con la plataforma convencional, lo que reduce el coste. Esta tecnología tiene aún más sentido para los barcos de Silent que funcionan con energía solar renovable puesto que la energía generada por la cometa supera con facilidad el consumo de energía del sistema de manera que se pueden cargar las baterías durante la navegación a través de los paneles solares. "Y además de eso, ¡es muy divertido!".
El ala de cometa se recoge mediante un cabrestante evitando tener que instalar un mástil para sujetar una vela convencional.
Una aplicación automatizada controla la posición del cometa respecto al barco y permite colocarla sobre su vertical, donde recibe menos empuje del viento, para que un cabrestante eléctrico la recoja.
Según Silent Yachts, el SILENT-60 puede navegar de manera eficiente y cero emisiones utilizando únicamente energía solar hasta 100 millas náuticas por día (185 kilómetros) y puede mantener ese ritmo durante semanas. La velocidad de crucero del barco es de seis a ocho nudos y la máxima de 20 nudos.
En cuanto al interior, el SILENT-60 es un yate de lujo, con cuatro camarotes para invitados, pero Silent Yachts permite el diseño personalizado para aquellos que estén dispuestos a pagar un poco más. El SILENT-60 tiene un precio inicial de 2,39 millones de euros. El primero de estos yates solares SILENT-60 se construyó en Tailandia, pero la compañía tiene planeado construir nuevas unidades futuras en Italia. Además, Silent Yachts ya ha compartido planes de diseño para dos modelos más, el SILENT-80 y SILENT-100.