En los próximos años General Motors invertirá más de 35.000 millones de dólares en el coche eléctrico. La gama EV de sus compañías crecerá exponencialmente con más modelos y una producción significativamente alta. Los planes de la compañía son muy ambiciosos con respecto a la electrificación. Sin embargo, no lo han demostrado con el lanzamiento del Chevrolet Corvette E-Ray. El primer Corvette electrificado de la historia ha dejado insatisfechos a muchos que esperaban una versión 100% eléctrica. El jefe de la marca explica los motivos por los que no se ha hecho la transición completa.
Hay que tener en cuenta que el mundo y la tecnología cambian muy deprisa. Si echamos la vista atrás, el coche eléctrico era algo completamente extraño hace unos años. Además de Tesla, pocas eran las compañías que optaban por formatos 100% EV. Chevrolet no era una de ellas. Los americanos se han puesto, literalmente, las pilas, pero Mark Reuss, el presidente de General Motors, ha declarado a la CNBC, las razones más que sobradas para que la joya de la corona sea híbrida y no eléctrica.
El principal escollo ha sido la plataforma. El desarrollo del Corvette C8, la generación actual, comenzó hace más de 5 años. Por entonces, como ya hemos dicho, la electrificación del parque estaba muy lejos de la actual. Si bien en las primeras reuniones de planificación ya se abrió la posibilidad a la creación de una versión electrificada, la conversión total no entró en los planes porque los sistemas eléctricos de entonces no ofrecían las mismas capacidades que hoy. La plataforma se desarrolló para incluir una variante híbrida y así ha sido. De hecho, es la versión más potente de todas las que ha habido.
El Corvette E-Ray combina un poderoso motor V8 atmosférico de un C8 normal y corriente con un motor eléctrico de apoyo que suma 160 caballos a la mezcla. A máximo rendimiento, el Corvette E-Ray desarrolla un total de 655 caballos de potencia. Capaz de hacer el 0 a 100 Km/h en 2,5 segundos y el cuarto de milla en apenas 10,4 segundos, la velocidad máxima alcanza los 290 kilómetros por hora. La batería, de apenas 1,9 kWh de capacidad, permite al deportivo americano moverse de forma 100% eléctrica durante un pequeño espacio de tiempo. En España recibiría la etiqueta ECO de la DGT.
Con respecto a la variante 100% eléctrica, el propio Reuss ha confirmado que llegará, pero no en esta generación ni dentro de poco. El Corvette C8 estará en el mercado durante al menos cinco años más, por lo que podemos esperar una versión totalmente eléctrica hasta finales de la década o principios de la que viene. Es muy posible que no sea el Corvette deportivo el que estrene esa versión. Hace poco supimos que Chevrolet está pensando en convertir al Corvette en toda una familia, siguiendo los pasos de Ford con el Mustang. Los rumores sobre un Corvette SUV eléctrico indican que podría llegar en 2025 o 2026.
Mientras tanto, GM espera retomar el pulso al mercado europeo dentro de poco. La llegada de plataformas y mecánicas eléctricas permitirá a los americanos volver a un continente que abandonaron con más pena que gloria. General Motors espera exportar muchos modelos que apoyen la estrategia eléctrica y así restar ventas a sus más directos rivales. Las primeras marcas en llegar serán Cadillac, Chevrolet y Hummer. Se desconoce si el Corvette E-Ray estará disponible en Europa, aunque está claro que su llegada podría más emoción a un mercado cada vez más animado.