El director ejecutivo de Tesla y mayor accionista de la compañía, Elon Musk, ha estado insinuando durante años la posibilidad de hacer un coche eléctrico asequible para la mayoría. No un coche de unos 50.000 euros como el Tesla Model 3, sino un modelo más pequeño que pueda estar en el rango de los 25.000-30.000 euros. Como tantos otros propósitos de Tesla, este se ha ido demorando en el tiempo para dar prioridad a otros asuntos más rentables. Sin embargo, el próximo miércoles puede ser, por fin, el día en que conozcamos las primeras pistas del Tesla más barato.
El próximo miércoles se celebra el Día del Inversor de Tesla (Tesla Investor Day), un evento que sigue a los celebrados en años anteriores (Autonomy Day en 2019, Battery Day en 2020, AI Day I en 2021 y AI Day II en 2022) en los que la marca estadounidense ha hecho grandes anuncios, en uno u otro sentido. A veces centrándose en nuevas tecnologías de baterías, otras en la conducción autónoma...
En este evento que se celebrará el próximo 1 de marzo, Elon Musk presentará la tercera parte de su Plan Maestro (él mismo lo denomina así). Se espera que el coche asequible de Tesla sea la parte central de dicho plan, junto con planes para reducir costes de producción en sus coches eléctricos y para aumentar la producción, tanto de baterías como de vehículos.
Precisamente, las baterías son el principal obstáculo para fabricar un coche eléctrico que sea, al mismo tiempo, asequible para el público y rentable para el fabricante. El propio Musk dijo el año pasado que había pospuesto los planes para lanzar un modelo más barato que el Model 3 debido a que todavía no han "dominado" la tecnología de baterías necesaria para hacer este tipo de coche. Sin embargo, con los modelos actuales ya encauzados y produciéndose a pleno rendimiento, el objetivo de Tesla de vender 20 millones de coches en el año 2030 pasa irremediablemente por lanzar un modelo más económico. Algunos rumores apuntan que este nuevo modelo podría llegar al mercado en 2025 o 2026, aunque la firma americana no ha hecho ninguna declaración oficial al respecto.
En la junta anual de accionistas de Tesla celebrada el pasado agosto, Musk sí afirmó que la tercera parte de su Plan Maestro iba a consistir "fundamentalmente en escalar" tanto la producción de automóviles como la cadena de suministro que la sustenta, así como los materiales y componentes de las baterías. Por otro lado, en una entrevista en el podcast Getting Stoned, Musk afirmó que la velocidad a la que Tesla puede hacer la transición a la sostenibilidad es "la velocidad a la que podemos aumentar la producción de baterías de iones de litio". Cómo lo hace, o cómo tiene pensado hacerlo, es la mayor incógnita a día de hoy, pero al mismo tiempo puede suponer uno de los mayores logros en la historia de Tesla.
Diecisiete años del primer Plan Maestro
Han pasado casi 17 años desde que Elon Musk presentase la primera parte de su Plan Maestro en una entrada en su blog titulada "El plan maestro secreto de Tesla Motors (solo entre tú y yo)". De manera resumida, el plan constaba de cuatro partes:
- Crear un coche eléctrico de bajo volumen de ventas y elevado precio dirigido a clientes que quisieran diferenciarse del resto. Este sería el Tesla Roadster.
- Con los beneficios de este primer modelo, desarrollar un segundo coche eléctrico de mayor volumen y con un precio ligeramente más asequible. Este modelo se conoció después como Tesla Model S y, algo más adelante, se presentó el Tesla Model X.
- Con los beneficios conseguidos con el Model S, lanzar al mercado un eléctrico producido en gran masa y con un precio más asequible, el que a la postre se convirtió en el Tesla Model 3.
- Crear una división Tesla Energy para proporcionar energía solar a los clientes para recargar sus vehículos en casa y en la red de cargadores.
Aunque incumpliendo las fechas previstas una y otra vez (seña de identidad de Elon Musk), y tras conseguir salvarse de la quiebra en varias ocasiones, Tesla llevó a cabo todos los puntos. La segunda parte del Plan Maestro se publicó en julio de 2016 y se centraba en otros cuatro puntos principales:
- Apostar por la energía solar mediante tejados solares y sistemas de baterías estacionarias.
- Ampliar la línea de productos de vehículos para abordar todos los segmentos principales, incluyendo el transporte de mercancías pesadas y el transporte urbano de pasajeros.
- Desarrollar una capacidad de conducción autónoma 10 veces más segura que la manual, mediante el aprendizaje de la flota.
- Crear una plataforma de coches compartidos que permita a los propietarios de un Tesla ganar dinero cuando no está utilizando el coche personalmente.
Si tenemos en cuenta que el camión eléctrico de Tesla ya se fabrica en pequeñas series y ha empezado a trabajar con clientes, podemos dar por conseguidos los dos primeros puntos. El tercero es un tanto controvertido y el cuarto es un proyecto en punto muerto.