El Dacia Spring llegó al mercado europeo para poner patas arriba todo lo conocido hasta entonces sobre vehículos eléctricos asequibles. El pequeño modelo del Grupo Renault ha demostrado ser un superventas y uno de los modelos más queridos por el público general. Sin embargo, desde la marca han confirmado la llegada de una renovación importante que recaerá sobre los diferentes apartados del mismo, desde la estética, pasando por la mecánica y la tecnología.
El coche eléctrico más barato de Europa se rediseñará en gran medida para seguir plantando cara a modelos de su competencia, especialmente procedentes de China. Según el jefe de Diseño de Dacia, David Durand, el pequeño eléctrico “carece de un poco de modernidad” y esto es algo que quieren remediar, ya que afirman que esto podría ser fuente de una importante pérdida en las cifras de ventas o un descenso importante en el interés por parte del público. “Debe reconsiderarse su imagen para expresar más esa tendencia eléctrica”, afirmó el responsable.
Según lo que ha podido afirmar el responsable de diseño, la actualización del Spring “llegará pronto”. Concretamente, será en algún momento del año 2024 cuando el coche eléctrico aterrice en el mercado europeo con su nueva cara, aunque Durand ha confirmado que “no se alejará demasiado del espíritu del automóvil actual”.
El directivo ha elogiado la capacidad y lo polifacético que puede llegar a ser este coche: “Nos dimos cuenta de que mucha gente en los suburbios lejanos o incluso en el campo tiene un Spring como segundo coche. No significa que el Spring vaya fuera del asfalto, sino que es un coche que no sólo se usa en los centros urbanos”.
El actual Dacia Spring planta su base en el Renault Kwid, un pequeño crossover que se comercializa en ciertos mercados emergentes desde el pasado año 2015. Es por ello que, desde la marca, estiman oportuno renovar el vehículo por completo, dados los buenos datos de comercialización que ha presentado hasta ahora, huyendo así de riesgos o posibles miedos a una mala acogida del mercado.
Debido a que la receta del Dacia Spring ya se ha demostrado exitosa, el modelo que sustituya al actual continuará presentándose como un pequeño crossover de aspecto llamativo, pero elementos (especialmente interiores) que buscan la economía y la durabilidad por encima de otros adjetivos.
Todos los rumores apuntan a que el nuevo Spring aterrizará con unos grupos ópticos actualizados (tanto delanteros como traseros), llantas de nuevo diseño, aunque no necesariamente más grandes, así como nuevas opciones de colores para el exterior o una mejora de su interior, especialmente en términos de conectividad y calidad de acabados.
Aunque sí se espera una puesta al día mecánica por parte del Spring, no se cuenta con que lleguen elementos o especificaciones rompedoras. No obstante, Denis Le Vot, CEO de Dacia, apuntó recientemente en unas declaraciones no exentas de polémicas: “Si hiciéramos de nuevo el Spring, reduciríamos la batería a la mitad porque en Europa, de promedio, no se hace más de 16 kilómetros al día”.
Es difícil imaginar que Dacia vaya a llevar a cabo tal tijeretazo en la autonomía del coche, pese a sus datos de conducción promedio. Es probable que en la actualización se mantenga aproximadamente la misma autonomía que ya presenta a día de hoy (alrededor de 230 kilómetros), mientras que su potencia sí podría verse incrementada notablemente.