Desde la llegada de BYD a Europa y, más concretamente, a España, han pasado algunos meses y muchas de las personas que estigmatizaban a las compañías chinas como “baratas” han cambiado de opinión. La firma oriental cuenta con un posicionamiento de mercado más enfocado en las marcas de precios no tan asequibles, como pueden ser BMW, Mercedes, Audi o Volkswagen, entre otras. Su proyecto de conquistar Europa con sus modelos no ha hecho más que comenzar y en su idea está el “ser los mejores”.
Aunque sus ventas en España aún no son dignas de mención, debido a que no cuentan todavía con grandes números, lo cierto es que esta compañía sí ha llamado la atención de muchos potenciales clientes, aunque sus precios no son tan bajos como inicialmente cabría esperar. Sin embargo, estos sí son significativamente inferiores a los modelos alemanes con los que quieren competir, mostrándose así como una apuesta segura en el cara a cara.
No obstante, la empresa tiene una hoja de ruta a medio plazo con la que esperan seducir al Viejo Continente. El propio Brian Yang, vicepresidente de BYD en Europa, afirmó en una entrevista con el medio Stern: “Quiero estar entre los cinco primeros de Europa. La ventana para tener éxito todavía está abierta para los próximos dos años”. En los próximos meses, la compañía ha confirmado la llegada de nuevos modelos, además de los que ya está actualmente en comercialización, como son el Han, Tang, Atto 3 y Dolphin. Posteriormente, aterrizarán el Seal y el Seal U.
A pesar de que esta mencionada hoja de ruta se presenta del todo prometedora, muchos son los que echan en falta una alternativa asequible que sirva como entrada a la compañía. Por ello, desde el mencionado medio se le preguntó a Yang sobre la posibilidad de que el BYD Seagull llegue a Europa, un coche eléctrico que actualmente se vende en China por un precio de 10.400 euros al cambio.
“Queremos estar presentes en todos los segmentos”, aseguró el responsable. Con ello ha dejado la puerta abierta a esta posible llegada, pero también a la de otros modelos más extremos, como el BYD U8, un todoterreno eléctrico, o el BYD U9, el superdeportivo de alrededor de 1.300 CV. A esto, Yunfei Li, gerente de la marca, añadió: “Nos hemos estado preparando para este momento durante 20 años. No queremos ser los más baratos, pero queremos ser los mejores. En cuanto a tecnología, seguridad, diseño y, sobre todo, servicio. Por eso, buscamos a los mejores socios en cada país”.
Por otro lado, Lars Pauly, responsable de ventas de BYD Alemania, ha asegurado que la compañía está actualmente ocupada configurando las estructuras de ventas en el país. Según él (sin entrar en demasiados detalles), la marca quiere ofrecer “un vehículo eléctrico alcanzable y estar en segmentos de precios donde otros no pueden estar activos en el medio y largo plazo”. ¿Supondrá esto la llegada del Seagull a Europa? Por el momento, no existe una confirmación oficial al respecto, aunque su enfoque encajaría como rival del Dacia Spring, por ejemplo.
Según las declaraciones de los responsables de BYD el pasado mes de junio, la compañía espera alcanzar una cuota de mercado en Europa de entre el 5% y el 10 % en el segmento eléctrico a medio plazo.
