Que el público demanda coches eléctricos baratos es una realidad que no se debería cuestionar. Pasará en todos los mercados cuando comprar uno de combustión ya no sea la opción preferente. Salvo excepciones, y por ahora, la oferta eléctrica no es precisamente asequible. Una realidad que está cambiando y que ya se refleja en mercados como el de China, el más grande del mundo, donde comprar un coche eléctrico barato empieza a ser lo habitual.
No es lujoso, no es potente, no es bonito, pero es superventas indiscutible. El Wuling Hongguang Mini EV ha conseguido ser el coche eléctrico más exitoso de la historia. Solo en el mercado chino, que es donde se vende (y muy bien), ya se han matriculado un millón de unidades desde que se lanzó en 2020, de las que más de la mitad (555.067) se corresponden al año 2022.
Su éxito es innegable ya que estas cifras aumentan un 30% respecto a la de 2021. El pequeño utilitario urbano, de tan solo tres metros de largo, representa el 9,5% del mercado eléctrico en China. Varios han sido los fabricantes que han querido arrebatarle parte de su nicho de mercado desde 2020, pero no se inmuta ante esta competencia. Detrás de él, en el mismo segmento, pero muy lejos, está el Chery QQ Ice Cream, del que se han matriculado en 2022 solo 96.539 unidades.
En total, Wuling, una marca propiedad de la empresa conjunta SAIC-General Motors, ha vendido 1,1 millones del Hongguang Mini EV desde 2020. En vísperas del lanzamiento de su hermano mayor, el Bingo, la empresa está particularmente satisfecha y ha decidido lanzar una promoción válida para los próximos tres meses. El precio del modelo base, el único que recibe esta oferta, se reduce de 32.800 a 29.800 RMB (de 4.470 € a 4.060 € al cambio actual).
El precio de la versión más cara, la descapotable, se mantiene en 99.900 RMB (13.600 €). ¿Caro? Mucho más. Sin embargo, sigue siendo el cabrio más barato del mercado.
¿Qué hay debajo de la carrocería de un coche eléctrico tan barato?
Lo que hace diferente a este coche eléctrico de la competencia es, probablemente, que está pensado, diseñado y fabricado para quienes lo necesitan. En sus apenas tres metros de longitud pueden viajar, más o menos cómodamente, cuatro personas adultas (o dos, con equipaje, si se abaten los asientos traseros y se liberan 741 litros en su maletero). Lo harán solo por la ciudad, porque su autonomía es la justa y necesaria para ello, aunque dependerá de la batería que se escoja: 120 km en la antigua homologación NEDC europea, si se opta por la de 9 kWh de capacidad y hasta los 300 km si se aumenta esta hasta los 14 kWh.
Bajo el capó tampoco hay nada especial. Un pequeño motor eléctrico de 13 kW (17 CV) que ofrece suficiente par motor (85 Nm) para circular con soltura por la ciudad a una velocidad máxima de 100 km/h.