Volkswagen invertirá 1.000 millones de euros en su planta de Emden (Alemania) para transformarla en una instalación centrada en la producción de vehículos eléctricos, según informó la empresa, que prevé fabricar el primer coche eléctrico en este centro en 2022.
El consejero delegado de la marca Volkswagen, Ralf Brandstätter, afirmó que, con la transformación de este centro a la movilidad eléctrica, la compañía está "forzando el ritmo hacia un cambio de sistema".
La empresa automovilística tiene previsto iniciar en 2022 la fabricación del SUV eléctrico ID.4 en esta factoría, mientras que la producción del Passat y Arteon se mantendrá en esta sede de forma transitoria durante "varios años".
No obstante, en un momento final de desarrollo, la factoría tendrá una capacidad de producción estimada de unos 300.000 vehículos eléctricos al año. La compañía pondrá en marcha nuevas instalaciones en el centro para acompañar la fabricación de modelos eléctricos, cuya construcción finalizará en verano del año que viene.
Como parte de esta trasformación a la fabricación de modelos electrificaods, los trabajadores de esta planta recibirán más de 60.000 días de formación hasta el momento en el que la nueva fábrica se ponga en marcha.
En Alemania, los vehículos eléctricos del Grupo Volkswagen se fabricarán en Zwickau, Emden, Hannover, Zuffenhausen y Dresde. En otros países, los automóviles eléctricos se fabricarán en Mladá Boleslav (República Checa), Chattanooga (Estados Unidos), Foshan (China) y Anting (China).
Volkswagen tiene el objetivo de ser líder en movilidad eléctrica, de forma que para 2025 habrá lanzado al mercado más de 20 modelos 100% eléctricos, entre los que se encuentran los ya anunciados ID.3 e ID.4.