La convergencia entre la industria del automóvil y la aeronáutica ha sido evidente durante mucho tiempo. Sin embargo, hasta ahora se centraba en gran medida en el diseño de interiores o en la vinculación entre productos, que se ha llevado a cabo experimentando con proyectos de aviación en estudios como Designworks de BMW o Peugeot Design. Con el futuro de la industria automotriz firmemente dirigido hacia los vehículos CASE (Connected, Autonomous, Shared & Electric – Conectados, Autónomos, Compartidos y Eléctricos, por sus siglas en inglés), hay margen para ir un poco más allá. Para muchos de los fabricantes tradicionales esto significa tener un interés más significativo en la aviación como una forma de aumentar las soluciones de movilidad personal del futuro.
Daimler, Geely y Volocopter
Volocopter es una empresa alemana que cuenta con la inversión de dos grandes grupos automovilísticos. Desde 2017, el también alemán Daimler, que ha puesto sobre la mesa 25 millones de euros y desde 2019, el grupo chino Geely, con 23 millones. El resultado es el Volocity, una nave de dos asientos que cuenta con 9 baterías de iones de litio intercambiables que alimentan sus 18 rotores eléctricos. La autonomía de vuelo es de 35 kilómetros y la velocidad máxima que puede alcanzar de 110 km/h.
El prototipo actual todavía necesita ser pilotado por un humano, pero ya incluye funciones autónomas integradas. También se ha desarrollado una versión comercial, el VoloDrone que es capaz de transportar una carga de 200 kg. Fue mostrado a finales de 2019 acompañado de un sistema de pulverizador de cultivos diseñado en colaboración con el fabricante de tractores John Deere.
El VoloCity ya ha realizado sus primeras pruebas en Dubai, como parte de una asociación con las autoridades locales que incluye un programa de cinco años. También ha volado en Singapur, Finlandia y Alemania.
Geely y Terrafugia
La inversión de Geely en Volocopter no es la primera en aviones personales del grupo chino. En 2017, la empresa adquirió por completo, y a través de Volvo, la firma estadounidense de automóviles voladores Terrafugia , creada en 2006 por ex alumnos del MIT, y que ha estado probando el Transition desde 2009.
Si bien su funcionamiento necesita un motor de gasolina tradicional, la empresa también está trabajando en el TF-X, un coche volador híbrido enchufable de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) que se lanzará en 2025. Según Terrafugia, tendrá capacidad para cuatro ocupantes, y estará propulsado por dos motores eléctricos y un motor de gasolina de 100 CV, con un alcance de 800 km en vuelo (1.296 en tierra) y una velocidad de crucero de 322 km/h.
Hyundai y Uber
Una de las grandes novedades del CES 2020 fue el anuncio de Hyundai de la construcción de los taxis aéreos con los que Uber llevará la movilidad aérea personal al mercado de masas. Por su parte, Uber proporcionará los servicios de soporte, las conexiones con el transporte terrestre y la interfaz del cliente. Uber ha declarado que planea comenzar este servicio en 2023.
El avión-taxi se llama Hyundai S-A1 y en él pueden viajar 5 ocupantes. Está diseñado para alcanzar los 290 km/h de velocidad crucero a una altitud de entre 1.000 y 2.000 pies (300-600 metros) sobre el suelo. Es completamente eléctrico y sus creadores aseguran que podría tener una autonomía de hasta 100 kilómetros, aunque no se conocen datos exactos sobre la capacidad de su batería, y se podrá recargar en menos de diez minutos.
La asociación es una de las muchas alcanzadas por Uber Elevate, la división de la empresa centrada en la aviación personal. Otros acuerdos incluyen a los fabricantes de aviones Bell, Boeing y Embraer, además de Joby Aviation, entre otros, aunque Hyundai es el primer fabricante de automóviles en asociarse a este plan.
Toyota y Joby Aviation
Los 394 millones de dólares que Toyota ha invertido en Joby son en realidad su segunda inyección de efectivo en la empresa con sede en California, ya que también participó en una ronda de financiación anterior en 2018. Toyota es ahora un socio oficial, aportando su experiencia en el control de calidad y de costes.
Como parte de la inversión, el vicepresidente ejecutivo de Toyota Motor Corporation, Shigeki Tomoyama, ocupa un puesto en la junta directiva de Joby y también tendrá voz en la dirección estratégica de la empresa a medida que se prepara para producir en masa sus aviones eléctricos de aterrizaje y despegue vertical que todavía no tienen nombre. Tendrán una capacidad para 5 ocupantes y sus seis rotores eléctricos podrán volar a una velocidad máxima de 322 km/h durante 240 kilómetros.
Aston Martin y Rolls-Royce Aviation (y Airbus)
Aston Martin reveló el Volante Vision Concept en el Farnborough Airshow 2018 en el Reino Unido. El trabajo de desarrollo de este avión eléctrico avanza gracias a su asociación con Rolls-Royce, que proporcionará los motores híbridos eléctricos, y Cranfield Aerospace Solutions y Cranfield University, que están desarrollando el programa aéreo. Los tres pasajeros que admite podrán desplazarse a una velocidad de 460 km/h gracias a los seis rotores eléctricos que lo impulsan.
Además, Aston Martin también se ha asociado con Airbus para el lanzamiento de forma conjunta del Airbus ACH130 Aston Martin helicopter a principios de 2020, con cuatro opciones de selección de acabado interior, de lujo, diseñados por el fabricante inglés.
Audi y Airbus
Estas dos firmas anunciaron una asociación en 2018 para desarrollar Pop Up Next, una mezcla entre un dron y un automóvil. Fue presentado en Ámsterdam por Bernd Martens, miembro de la junta directiva de Audi, como un prototipo de trabajo a escala, a un cuarto de su tamaño final: "Los taxis voladores están en camino. En Audi estamos convencidos de eso".
Un año después, Audi parece menos convencido de esto y ha pedido un tiempo de reflexión a la asociación. Sin embargo, Airbus continúa trabajando en su propia vehículo eVTOL, el CityAirbus , que tiene capacidad para cuatro ocupantes, puede moverse a 120 km/h y cuenta con una configuración de ocho motores y ocho rotores, alimentada por una batería de 110 kWh.
Porsche y Boeing
Las dos empresas firmaron un memorando de entendimiento en 2019. Los ingenieros de Porsche y Boeing aunarán esfuerzos para diseñar y desarrollar un avión VTOL completamente eléctrico. La medida es parte del plan de Porsche para convertirse en un proveedor de soluciones de movilidad premium, en lugar de solo ofrecer automóviles.
La asociación con Boeing también incluye un vínculo con la filial de la firma de Seattle, Aurora Flight Sciences, que fue adquirida en 2017. Esta última ha estado desarrollando aviones no tripulados desde 1989 y ha diseñado más de 30 de esos aviones en ese momento.