La mayoría de los informes sobre la evolución del mercado de los coches eléctricos predicen una intensa aceleración de las ventas a partir de este año. Sin embargo, el parón económico y social que está provocando la pandemia del coronavirus que paraliza buena parte de China desde el pasado mes de diciembre, y que ahora ahoga a Europa, está poniendo a prueba esta tendencia. A mediano y largo plazo la tendencia creciente se mantendrá, pero el mercado puede ponerse feo en los próximos 12 meses.
La propagación del virus en Europa y Estados Unidos, que en el mes de marzo ha paralizado prácticamente la actividad económica en sectores clave, al menos en el Viejo Continente, hace complicado predecir la tendencia y la duración del estado actual de los mercados, incluido el de los vehículos eléctricos. El sector del automóvil es uno de los más golpeados por esta crisis sanitaria. En la mayoría de los países se ha declarado la emergencia nacional, se han cerrado las fronteras y se han prohibido los desplazamientos que no sean estrictamente necesarios.
Ante este panorama, el pasado 9 de marzo el precio del petróleo colapsó, los bancos centrales de todo el mundo redujeron las tasas de interés prometiendo comprar deuda y procurando mantener la economía en movimiento. Según Ben May, director de Investigación macro global en Oxford Economics, "los datos económicos de la última semana parecen indicar la posibilidad de que la economía mundial esté entrando en recesión en respuesta al aumento de los casos de Covid-19 en todo el mundo".
Hyundai Kona fabricado en Europa.
La electrificación del automóvil es un hecho y la pandemia no lo va a parar, pero la recesión es una mala noticia para la industria. El año 2020 era clave en la estrategia con la entrada en vigor de la nueva legislación de emisiones en la Unión Europea. "La gente no va a comprarse un coche en este momento, de hecho no lo está haciendo", asegura Ram Chandrasekaran, líder de la consultora Wood Mackenzie.
La incertidumbre económica sobre la evolución y los efectos del coronavirus han hecho caer los precios del petróleo, lo que podría alentar a algunos compradores a adquirir vehículos con motor de combustión. "Si la caída de los precios de la gasolina se mantiene durante varios meses de forma que los compradores puede llegar a confiar en ella, puede perjudicar el lanzamiento de nuevos modelos eléctricos", afirma dijo Mark Wakefield, analista de AlixPartners.
Según analistas de BloombergNEF, el mercado global del automóvil se verá afectado por la contracción económica. Las ventas de automóviles eléctricos, en clara tendencia creciente en los últimos años, son sensibles a los patrones del mercado automotriz general. Esta circunstancia tendrá consecuencias negativas sobre las ventas de vehículos eléctricos y sobre la capacidad de fabricación de baterías. Los primeros datos de BNEF muestran que las ventas totales de vehículos cayeron un 44% en China en enero y febrero en comparación con el mismo período en 2019, y un 18% en Corea del Sur, dos de los países más afectados por el brote de la enfermedad.
"Los próximos 12 meses podrían ser realmente feos para el mercado", afirma Colin McKerracher, analista de transporte de BloombergNEF. Sin embargo, todavía hay motivos para la esperanza. A mediano y largo plazo las ventas de vehículos eléctricos crecerán en Europa, "incluso este año", a pesar de la contracción general del mercado. Para la mayoría de los consumidores, el alto precio inicial es el mayor freno a la venta de vehículos eléctricos. El precio de las baterías sigue cayendo y "este dato es más importante que la subida del precio del petróleo".
Evolución del precio de las baterias de los coches eléctricos.
Los fabricantes han realizado fuertes inversiones en su transformación eléctrica y el mercado espera lanzamientos importantes en lo que queda de año: el Volkswagen ID.3 debería llegar a manos de sus primeros propietarios en verano, y el ID.4 arrancar sus ventas a finales de año. El pasado 12 de marzo, Michael Jost, jefe de estrategia de Volkswagen, aseguró que "no hay alternativa a la estrategia de alcanzar la neutralidad en carbono en 2050, y no hay cambios en el camino".
La consultora de productos básicos, CRU Group redujo su estimación de ventas de coches eléctricos en China para 2020 de 1,5 millones a 1,35 millones de unidades, debido al impacto del brote de coronavirus en la economía del país. Una cifra que se mantiene por encima de los 1,2 millones de 2019.
Un coche eléctrico puede costar aproximadamente un 50% más que uno equivalente de combustión. Esta realidad de hoy cambiará en los próximos años a medida que evoluciona la tecnología de las baterías y aumenta su producción. Al ritmo actual, los analistas estiman que el precio de venta de los vehículos eléctricos coincidirá con el de los automóviles de combustión a partir de 2023.
Diego Díaz, responsable de nuevas empresas y tecnologías de Iberdrola, asegura que hay otros factores más allá de las económicas que impulsarán las ventas de vehículos eléctricos: la preocupación de los políticos por la calidad del aire y el cambio climático, "y prevemos que esto continuará". La empresa española anunció el 10 de marzo que invertirá 150 millones de euros para aumentar su red de cargadores para coches eléctricos en España que pasarán de los 5.000 actuales a 150.000 en 2025.