Hace unos meses, CUPRA desvelaba su estrategia hasta 2025 con el anuncio de sus tres próximos coches eléctricos. El CUPRA Terramar, el Tavascan y el UrbanRebel suponen una nueva era para una marca que, desde nacimiento, no ha hecho otra cosa que ganar en aceptación. Además de ser eléctricos, el diseño, la fabricación y la tecnología serán elementos diferenciadores que aumentarán su valor y reducirán su huella ambiental.
El equipo de Color&Trim de CUPRA ha trabajado en una total reinterpretación del diseño interior y exterior: "Hemos querido alejarnos de los códigos de materiales habituales en la automoción para enfocarnos en lo que más se acerca a las preferencias de las nuevas generaciones", explica Francesca Sangalli, responsable de Colour & Trim Concept & Strategy de CUPRA. "Los elementos naturales y respetuosos con el medioambiente promueven el crecimiento sostenible. Creemos que la sostenibilidad nos ha dado la oportunidad de reinterpretar la autenticidad de CUPRA", añade.
Una nueva interpretación de la sostenibilidad
Los diseñadores han continuado el camino iniciado con el Born, utilizando materiales respetuosos con el medioambiente, como el cuero vegano. En esta nueva etapa van un paso más allá con la introducción del concepto del Knitting, en el que los tejidos se crean totalmente a medida para no crear residuos. "Nos planteamos una arquitectura diferente a la hora de diseñar, para crear un producto desde otra perspectiva, gracias a la fabricación aditiva. Además de ser un material muy novedoso y ligero, no hay desperdicios y podemos crear gráficos dentro del propio material con un resultado único", afirma Sangalli. "La sostenibilidad no se trata solo de reciclar, también hay que reducir nuestra huella".
En sus futuros modelos eléctricos, la firma va un paso más allá con el empleo de fibras naturales procedentes de plantas como el lino o el cáñamo con las que construye piezas que hasta ahora se realizaban solo en fibra de carbono. Estas plantas tienen la propiedad de absorber una gran cantidad de CO2, con lo que su cultivo es beneficioso para el medio ambiente. "Y las piezas resultantes presentan un rendimiento comparable al Kevlar o la fibra de carbono", explica la diseñadora.
En el interior, ciertas partes se han transformado con la introducción de partículas metálicas. Otras han sido creadas con polímeros reciclados avanzados que no ocultan su auténtico aspecto "reinterpretando el plástico para hacerlo hermoso y sostenible" comenta Sangalli.
La tecnología 3D y 4D
Además del aspecto sostenible, la nueva estrategia en el diseño exige el uso de las últimas tecnologías digitales y la creatividad. Diseño paramétrico e impresión 3D son claves aquí: "La tecnología digital nos ha dado la oportunidad de crear superficies imposibles que cobran vida al tacto, generando sensación de movimiento. Hemos pasado de diseñar en 2D a hacerlo en 4D consiguiendo estructuras que con las nuevas técnicas se han convertido en verdaderas joyas", explica Sangalli.
