Las cuatro marcas del Grupo PSA tienen libertad de movimientos para establecer la estrategia de electrificación de su flota. Contando con la tecnología desarrollada por el Grupo, podrán decidir si lanzar coches 100% eléctricos o híbridos enchufables, según les dicte su criterio comercial. En él influyen las preferencias de sus clientes, la situación de desarrollo de la infraestructura de recarga en cada uno de los mercados y el empuje de la competencia.
Peugeot, DS, Opel y Citroën se centran en lanzar al mercado nuevos coches eléctricos, todos ellos como variantes de sus modelos de combustión. Según ha declarado a Autocar Anne-Lise Richard, responsable de la Unidad de Negocio de vehículos electrificados del Grupo PSA, la auténtica pelea se centra en la conquista del diluido segmento C. Donde antes el cliente solo podía elegir un compacto mediano para toda la familia y para todos los usos, ahora entran a también los SUV del segmento B, los SUV del segmento C, los compactos tradicionales e incluso algún modelo de tamaño superior del segmento D. En todos los casos con modelos electrificados total o parcialmente.
Según Richard, los clientes de este segmento pueden responder a múltiples perfiles: "a veces es el único automóvil de la familia, a veces no". Esta indeterminación provoca que requieran un vehículo más grande o les sirva uno más pequeño, que lo utilicen solo a diario o lo necesiten para todos los desplazamientos. La libertad de elección para las marcas del Grupo viene dada por la posibilidad de utilizar dos plataformas para desarrollar vehículos que se integren en el segmento C: e-CMP y EMP2, que dan lugar a coches 100% eléctricos e híbridos enchufables respectivamente. "Es una decisión de marca elegir cuál es la mejor", asegura Richard.
La directiva también confirmó que la intención del grupo es evolucionar la tecnología 100% eléctrica a una segunda generación basada en la siguiente generación de la plataforma EMP2. Que se haga realidad dependerá de lo que digan los clientes y de cómo evolucionan sus preferencias, antes de poner en marcha este cambio tecnológico.
Anne-Lise Richard, responsable de la Unidad de Negocio de vehículos electrificados del Grupo PSA
En este año, la oferta se centra en vehículos eléctricos urbanos y compactos desarrollados sobre la plataforma e-CMP (DS3 Crossback, Peugeot e-208, Opel Corsa-e) y en híbridos enchufables compactos y familiares que emplean la EMP2 (Citroën C5 Aircross, Peugeot 508, Peugeot 3008 Hybrid4, DS7 Crossback E-Tense, Opel Grandland X PHEV).
Los próximos lanzamientos dan una pista sobre las intenciones de las marcas del Grupo PSA respecto a su futuro inmediato para devolver a los clientes un vehículo compacto del segmento C. Peugeot se centrará en la tecnología híbrida enchufable ofreciendo un Peugeot 308 PHEV dentro de la gama. Por su parte Citroën acaba de anunciar la presentación del Citroën C4 eléctrico como una variante de la nueva generación del compacto francés. En los dos casos, esta electrificación no supone el abandono de los clásicos motores gasolina o diésel.
Las que todavía están decidiendo su estrategia son las otras dos marcas del grupo. DS parece decantarse por desarrollar modelos premium de los segmentos superiores, tanto en formato SUV, como berlina. En el caso de Opel, todavía no se ve próxima una nueva generación del Astra, que se asiente ya sobre una, o varias, de las plataformas de PSA.