No solo la electrificación y la búsqueda de sistemas y tecnología avanzada que permita aumentar la autonomía de las baterías –a la vez que se reducen los costes y tiempos de carga– están a la orden del día en la industria del automóvil. El desarrollo de nuevos programas de movilidad, principalmente dominados por los coches autónomos y los servicios de carsharing, es otra de las preocupaciones del sector.
Hay empresas, y fabricantes de coches que, sin embargo, van más allá y miran al cielo pensando que los vehículos voladores, combinados con un servicio de movilidad desarrollado específicamente para ello, pueden ser un gran negocio y pueden formar parte de la movilidad del futuro en las ciudades de las próximas décadas. Uber, Airbus, Aston Martin... Son varias las compañías que invierten dinero en ello. Estas son algunas de las apuestas por el coche volador más conocidas.
Boeing
Boeing confirmó hace unos días la creación de una nueva división destinada a crear vehículos aéreos autónomos para un servicio de 'taxis voladores' llamada Boeing NeXt. Boeing, que mantiene un 'pique' particular con Elon Musk, decididos a llevar a los humanos a Marte antes que él, apuesta por un sistema de gestión del tráfico aéreo mediante el uso de la inteligencia artificial. No hay más detalles sobre la recién creada división de Boeing.
Uber
Uber también está asociada con la NASA, precisamente, para que desarrolle un nuevo sistema de gestión del tráfico aéreo mientras que la propia Uber se encarga de desarrollar una aeronave funcional, eléctrica y autónoma. Mientras la empresa invierte en fabricar sus propios 'taxis voladores', su plan consistiría en utilizar aeronaves de terceros y pilotos externos llevándose una comisión por cada viaje. El servicio tiene la intención de estar operativo en 2020 en Los Ángeles bajo el nombre de UberAIR.
Airbus
Airbus y Uber estaban destinados a colaborar con el mismo propósito, pero el fabricante de aviones decidió tirar por su cuenta creando CityAirbus, un proyecto que desea ofrecer los primeros vuelos este mismo año después que, según la empresa, las pruebas hubieran arrojado resultados muy positivos. Los 'coches voladores' de Airbus serán de tipo VTOL, que permiten despegar y aterrizar de forma vertical, con una velocidad máxima de 120 km/h y una autonomía de apenas 15 minutos. Se podrán conducir manualmente hasta que las legislaciones permitan los vuelos autónomos.
Aston Martin
Aston Martin quiere entrar en la carrera por los 'taxis autónomos' gracias a una colaboración con la Universidad de Cranfield y Rolls-Royce. La intención es crear una nave de tres asientos. El vehículo, que está en fase de prototipo y diseño, debería estar probándose no más tarde de 2020. La firma de Gaydon lo describe como un "vehículo híbrido-eléctrico para el transporte aéreo urbano e interurbano". Mientras la Universidad de Cranfield se ha ocupado de la parte técnica, Rolls-Royce ha utilizado toda su experiencia en el desarrollo de motores de aviones para crear su sistema de propulsión.
Rolls-Royce
Aunque colaboran con Aston Martin, Rolls-Royce también tiene planes propios para la carrera de los 'taxis aéreos' con una nave que, según la cadena de televisión CNBC, sería capaz de transportar cinco pasajeros a más de 400 km/h y con un autonomía de hasta 800 kilómetros. El EVTOL, el vehículo volador en cuestión, sería solo un prototipo y faltaría probarse, aunque la marca británica lo mostró en el Farnborough International Airshow el pasado lunes 16 de julio. Rolls-Royce, según la cadena de televisión, estaría buscando socios para desarrollar toda la tecnología de conectividad para usarse en un EVTOL para producción comercial.
Toyota
Toyota anunció, ya en mayo de 2017, su intención de invertir en Cartivator, empresa que creó el vehículo volador eléctrico SkyDrive, lanzándose así de cabeza en la carrera por desarrollar los primeros 'taxis voladores'. Los japoneses pagaron 9.300 millones de dólares en investigación y desarrollo buscando, como objetivo principal, la creación de un 'coche' volador funcional y operativo para 2018 y poder usarse a principios de 2020, estando totalmente listo para los Juegos Olímpicos de Tokio.
Terrafugia
Geely, el grupo propietario de marcas como Volvo, Polestar o una participación mayoritaria de Daimler AG, también invirtió mucho dinero en Terrafugia, quizás la empresa que lleva más tiempo investigando la posibilidad de crear vehículos voladores urbanos, concretamente desde 2009. Esta compañía ya cuenta con varios prototipos y su intención final es vender su primer modelo funcional el año que viene. No hay detalles sobre la nave, ni de propulsión, ni de imagen, ni de prestaciones, pero sí hay muchas imágenes de prototipos de la marca.
PAL-V Liberty
PAL-V dió a conocer su primer modelo de producción del coche volador Liberty en el Salón de Ginebra 2018 del pasado mes de marzo. PAL-V ya acepta reservas de su coche volador Liberty a razón de 25.000 euros. Quienes lo reserven tendrán derecho a tomar 10 clases de vuelo en su zona de residencia. El coche volador se comercializará con un precio estimado de 299.000 euros para la versión estándar y de 499.000 euros para la edición inicial PAL-V Liberty Pioneer Edition.