La aventura de Fisker en la complicada industria automovilística tiene cada vez más pinta de acabar mal, y de acabar más pronto que tarde. La marca que fundó Henrik Fisker está atravesando momentos muy complicados, hasta el punto de que ya ha avisado a sus empleados que podría despedirlos en poco tiempo si no encuentran financiación. Y esa búsqueda de financiación toca incluso lo personal, pues el fundador y mayor accionista de la empresa ha puesto en venta su lujosa mansión.
El director ejecutivo de Fisker, Henrik Fisker, ha puesto a la venta su lujosa y ultramoderna casa de Los Ángeles por 35 millones de dólares, que son algo más de 32 millones de euros al cambio actual. Una cantidad extraordinariamente elevada que responde no sólo al tamaño y el lujo de la casa, también a su privilegiada ubicación: en Hollwood Hills, una de las zonas más exclusivas de Los Ángeles.
La casa de Fisker es realmente impresionante. La mansión tiene 1.096 metros cuadrados (sobre una parcela de 1.740 metros cuadrados en total), 6 habitaciones y 8 baños. Está situada en una colina, por lo que tiene unas vistas privilegiadas de la ciudad, que se puede ver desde varias estancias de la casa, incluidos varios dormitorios y, por supuesto, desde la piscina infinita de su impresionante terraza.
Tiene todas las comodidades que cualquiera podría desear, evidentemente con unos acabados de gran lujo: spa interior, sauna, gimnasio, una espectacular terraza... Sorprendentemente, el garaje no es demasiado grande en proporción al resto de la mansión: tiene capacidad para 6 coches dispuestos en dos alturas gracias a un sistema elevador hidráulico.
No sabemos la razón por la cual Henrik Fisker ha puesto a la venta su lujosísima casa, pero lo cierto es que su empresa se encuentra actualmente en una situación límite. Las ventas del Fisker Ocean, un SUV eléctrico que prentendía competir en el segmento del Tesla Model Y, son testimoniales y las críticas de quienes lo han probado no han sido buenas. A principios de este mes, el fabricante señaló que posiblemente tenga que declararse en quiebra próximamente si no consigue financiación. También ha habido rumores de que Henrik Fisker se reunió con varios directivos de fabricantes establecidos para negociar una posible venta, pero, pese a los intentos por mantener a flote su empresa, todo pinta bastante mal.
En un correo electrónico obtenido por Business Insider, cuya autenticidad han supuestamente confirmado varios empleados de Fisker, la empresa reconocía sus esfuerzos continuos para abordar los problemas de flujo de caja, incluidas conversaciones con posibles compradores e inversores, así como posibles opciones de reestructuración. Sin embargo, el correo electrónico también advertía que "existe la posibilidad (...) de que estos esfuerzos no tengan éxito".
A modo de curiosidad, la casa vale más que la capitalización de Fisker en bolsa: la compañía está valorada actualmente en 26 millones de dólares. Henrik Fisker y su esposa, Geeta Gupta-Fisker, compraron esta propiedad en 2021 por 21,8 millones de dólares, así que se ha revalorizado de manera notable en muy poco tiempo. Si algún lector está interesado, la casa también disponible para alquiler por unos módicos 125.000 dólares al mes (116.000 euros).
Puedes ver más imágenes y detalles del anuncio de la casa en este enlace.