Hay dos debates que siempre están sobre la mesa cuando se habla de coches eléctricos. El primero es el coste de la electricidad. O, mejor dicho, la comparativa entre el precio de la electricidad y el de llenar un tanque de gasolina o diésel. El segundo es el tiempo de recarga. Y es que la velocidad de carga puede marcar la diferencia en una situación en la que estamos bajos de autonomía y necesitamos recorrer más kilómetros de la cuenta. A lo largo de estas líneas vamos a dar respuesta a estas dos cuestiones.
¿Cuánto cuesta recargar un coche eléctrico en casa?
No hay que hacer muchas cuentas para llegar a la conclusión de que usar un coche eléctrico que recargamos en casa nos va a costar menos dinero que si tuviéramos que pasar por la gasolinera con un vehículo de combustión. Aquí estamos quitando de la ecuación el sobreprecio del vehículo y del cargador, despejando únicamente el coste variable, que en este caso, es la energía.
Pero no todo es enchufar el coche. Hay que hacer una serie de modificaciones para que la inversión juegue a nuestro favor. Lo principal que hay que comprender es que hay que cambiar la tarifa eléctrica y pasar al mercado libre con discriminación horaria. Esto nos va a permitir cargar el coche por las noches a tarifas extraordinariamente bajas, aunque, para ello, tendremos que programar el cargador para que únicamente trabaje en esas franjas de tiempo.
Todas las grandes comercializadoras de electricidad tienen en España tarifas con horas Valle y Supervalle, con precios que van entre los 0,03 €/kWh hasta los 0,11 €/kWh. Calcular el coste de una recarga completa es tan sencillo como multiplicar el consumo de energía total por el precio medio de la tarifa eléctrica de ese día. Para una batería promedio actual (60 kWh), el coste de cargarla completamente puede ser de apenas 2-3 euros con una tarifa adecuada.
¿Y cuánto cuesta recargar el coche eléctrico de viaje?
Si cargar en casa a baja velocidad con una tarifa reducida es el punto fuerte del coche eléctrico, cargar en carretera es, sin lugar a dudas, un punto débil en términos económicos. Son varios los factores que condicionan los precios a la hora de efectuar una recarga en carretera.
- El primer motivo es que la red de electrolineras en España está todavía en fase de despliegue. La oferta es baja, mientras que la demanda es alta, lo que facilita que los precios no sean especialmente asequibles.
- Por otro lado, en este tipo de estaciones, lo que buscamos es estar parados el mínimo tiempo posible. Es decir, queremos cargar a la máxima potencia que permite nuestro vehículo. Este tipo de infraestructuras de carga rápida son realmente caras de construir y están ubicadas en lugares donde el consumidor apenas tiene alternativas. Por tanto, tocará pagar tarifas mucho más altas.
A continuación, te dejamos una tabla comparativa con los precios de las cadenas comercializadoras más conocidas en España. Para que la información sea más sencilla de comprender, hemos dividido en columnas en función del tipo de carga que queramos efectuar y el precio de cada kW que vamos a introducir en la batería de nuestro automóvil:
Comercializadora | Carga lenta (hasta 22 kW) | Carga semirrápida (22-50 kW) | Carga rápida (100-350 kW) |
---|---|---|---|
EDP | 0,47 €/kWh | 0,60 €/kWh | 0,60 €/kWh |
Endesa X | 0,45 €/kWh | 0,50 €/kWh | 0,60 €/kWh |
Iberdrola | 0,35 €/kWh | 0,45 €/kWh | 0,54 a 0,69 €/kWh |
Ionity | - | - | 0,65 €/kWh |
Repsol | 0,29 €/kWh | 0,39 €/kWh | 0,44 €/kWh |
Tesla | - | - | 0,53 €/kWh / 0,71 €/kWh1 |
Wenea | 0,38 €/kWh | 0,42 €/kWh | 0,56 €/kWh |
Zunder | 0,44 €/kWh | 0,44 €/kWh | 0,60 €/kWh |
1 Precio para usuarios de vehículos que no son Tesla
Además de estos precios, algunas compañías tienen sus propios servicios de suscripción con pago mensual que brindan a sus clientes la posibilidad de recargar con precios más bajos. En general, elijamos un punto de carga normal o una electrolinera, cargar fuera de casa sale significativamente menos económico. No obstante, tarde o temprano, tendremos que utilizar estos servicios si nos hacemos con un vehículo eléctrico.
¿Cuánto tarda en cargar un coche eléctrico en 2023?
Hasta ahora, nos hemos centrado únicamente en el coste de la propia recarga de la batería. Sin embargo, el tiempo es otra variable de la ecuación que tampoco debemos olvidar, aunque ya te adelantamos que no es tan fácil de controlar.
Todo coche eléctrico soporta una velocidad máxima de carga, tanto en corriente continua como alterna. Independientemente de que utilicemos un cargador más avanzado, no podremos superar esa limitación.
El segundo factor es la capacidad de nuestra propia batería. Independientemente del sistema de carga que soporten, no tienen la misma capacidad un Renault Zoe (52 kWh) que un Mercedes-Benz EQS (107,8 kWh). A la hora de hacer cálculos, utilizaremos la capacidad promedio, que va entre los 60 y los 80 kWh de batería.
Carga superrápida en cargadores de corriente continua
Los coches más modernos que acaban de salir al mercado son compatibles con sistemas de carga más avanzados de entre 100 y 350 kW en corriente continua. Este tipo de vehículos suelen anunciar tiempos de carga del 80% en cuestión de 30 minutos.
Recargar a estas velocidades solo es posible en las electrolineras más modernas, siempre y cuando tengamos un vehículo que soporte este tipo de tecnología. Como vimos en la tabla, también es el tipo de carga que tiene la tarifa más cara. En general, podremos cargar en tiempos muy cortos de entre 20 y 30 minutos para una recarga típica del 20 al 80%.
Carga rápida en cargadores de corriente continua
Las cargas entre 22 y 50 kW se consideran carga semirrápida. Con un vehículo con una batería promedio, tardaríamos una hora en recuperar una autonomía lo suficientemente generosa como para poder retomar el viaje. En caso de querer recargar al máximo, tendríamos que esperar más tiempo, aunque no siempre es recomendable, como veremos al final del artículo.
Carga lenta en cargadores de corriente alterna
Tanto en casa como en muchos aparcamientos públicos, lo que utilizaremos es un punto de carga de entre 3,7 y 11 kW con corriente alterna. Este tipo de dispositivos suelen cargar completamente un coche en cuestión de unas 8 a 12 horas. Aunque más lenta, es la forma más barata de cargar el coche.
Lo correcto es pensar en kilómetros, no en porcentajes
Estamos rodeados de dispositivos que utilizan baterías de litio y eso nos ha condicionado en cierta manera a la hora de enfrentarnos a la realidad del coche eléctrico. El tiempo de carga suele preocupar a muchas personas y es uno de los motivos por los que algunas no acaban comprando este tipo de vehículos. Sin embargo, este factor no es tan importante como parece.
El coche eléctrico no es un teléfono móvil. No es necesario salir de casa con la batería al cien por cien si solo vas a recorrer 20 kilómetros. Para poder utilizar con tranquilidad estos automóviles, lo importante es establecer una serie de rutinas para que el coche siempre tenga la autonomía suficiente que corresponda con nuestros deseos.
De ahí que hagamos tanto hincapié en recargar el vehículo por las noches, con una tarifa económica y con un cargador estándar de corriente alterna. Con este tipo de cargadores y manteniendo en la medida de lo posible la batería entre el 20 y el 80%, maximizaremos la vida útil de la batería y tendremos coche para muchos años.