¿Qué atributo es el que define la nacionalidad de un coche nuevo hoy en día? ¿Es el origen de su marca? ¿El consorcio al que pertenece la firma? ¿O el sitio en el que se fabrica? El CUPRA Tavascan presentado la semana pasada es un coche eléctrico que representa todo el potencial de CUPRA como marca, tanto en términos de tecnología eléctrica como de diseño, por lo que se puede decir que estamos ante el mejor coche español de todos los tiempos, ¿o no?
Y es que meses atrás, a través de SEAT, CUPRA confirmó que la producción del Tavascan, su segundo coche eléctrico después del Born, tampoco iba a tener lugar en la fábrica española de SEAT, sita en la ciudad de Martorell, así como tampoco en la fábrica que Volkswagen tiene en Navarra, algo que podría llegar a tener cierto sentido por las propias sinergias del grupo alemán. Pero es que tampoco se va a fabricar en la planta en la que se produce el Born junto al ID.3, en Alemania.
Y es que el Grupo Volkswagen ha querido llevarse la fabricación del Tavascan hasta la misma China con el fin de proyectar de la mayor manera posible la sombra de este coche eléctrico de manera global. Una decisión que desde el punto de vista estratégico, nos pese más o menos a los españoles, tiene todo el sentido del mundo.
Entonces, ¿estamos ante un modelo español porque pertenece a CUPRA y CUPRA a SEAT, alemán porque SEAT pertenece a Volkswagen o chino porque se fabrica en China?
Sea como fuere, lo cierto es que CUPRA se ha planteado de manera inicial producir unas 70.000 unidades anuales del Tavascán, una cifra similar a la que logró en 2022 el Volkswagen ID.4 en Europa. Se trata de una cifra ambiciosa en cierta medida, pues se prevé que un precio ligeramente superior del Tavascan. Eso sí, las unidades que salgan de la fábrica china del Grupo Volkswagen están destinadas a cubrir la demanda de todos los mercados, no sólo el Europeo, por lo que las cifras que logre en nuestro mercado se prevén menores que las del eléctrico de Wolfsburgo.
Con permiso del ID.7, el Tavascan es el mejor eléctrico del Grupo Volkswagen
El despliegue efectuado por la marca deportiva de Martorell para dar forma a este modelo lo convierte en el coche eléctrico más puntero y distinguido dentro del Grupo Volkswagen, siempre con permiso del recién presentado ID.7, que aspira a situarse por precio y prestaciones a la altura del Mercedes EQE, o lo que es lo mismo, a medio camino entre los Tesla Model 3 y Model S.
Ha sido el primero en hacer uso del último propulsor eléctrico en llegar a la agrupación de marcas teutonas y, además, también el primero en desmarcarse de manera clara de los establecidos interiores que hasta ahora han ido tomando lugar en todos los coches eléctricos del consorcio alemán. La prueba de esto último está tanto en el diseño de su consola central, como e de su salpicadero, así como también en la enorme pantalla de 15 pulgadas encargada de sostener el funcionamiento del sistema de infoentretenimiento.
Habrá dos versiones técnicas que se distingirán entre sí por su potencia y, por ende, por la eficiencia y autonomía. La versión más potente equipará este nuevo motor eléctrico por partida doble, colocando uno sobre cada eje. Rendirá 340 CV para ofrecer un 0 a 100 kilómetros por hora en 5,4 segundos. Se convierte así en el coche español más extremo que se ha fabricado hasta la fecha, dejando de lado, eso sí, modelos de tiradas limitadas y exclusiva concepción, como puede ser el Hispano Suiza Carmen.
La segunda versión, que es la que presumiblemente acaparará el mayor número de pedidos cuando dé comienzo su comercialización, es menos potente, pero también será la que más autonomía logre. Tendrá un motor eléctrico que rendirá 286 CV y, alimentado por una batería de 77 kWh de capacidad (la misma que la variante más potente), podrá ofrecer una autonomía de unos 550 kilómetros. La versión superior situará su rango de uso en unos 520 kilómetros.
No será hasta 2024 cuando dé comienzo la producción del CUPRA Tavascan en China, por lo que las primeras unidades de este radical SUV eléctrico no llegarán a manos de los clientes hasta pasada tal fecha.
